El teatro bar fue inaugurado el sábado con el mismo show y con lleno total, y en la noche del domingo paso lo mismo, quizá porque la gran mayoria de quienes fuimos invitados al show éramos mayores y porque la nostalgia siempre juega a favor de los clásicos.
Casi puntualmente Parisi subió al escenario acompañado de sus 4 músicos, guitarra, bajo, batería y teclados e inicio un repertorio que a muchos nos volvió a un pasado generoso en creatividad, en letras con contenido y por sobre un sonido musical lleno de arreglos y melodías que jamás han pasado de moda.
Temas como, Help, La Balada de John y Yoco, La vi parada ahí, Come Together, Strawberry Fields Forever, Imagine, en fin un recorrido completo por lo mejor de Lennon.
Y vamos al asombroso parecido físico de Parisi, con el ex Beatle, sus cambios de vestuario, lo transformaban cada 15 minutos en un Lennon diferente, y cuesta mucho diferenciar, quien es quien cuando uno lo ve a menos de 5 metros de distancia, su voz, su forma de tocar la guitarra, sus gestos y su perfecto inglés, realmente hacen dudar si no estamos ante un clon de ese musico que todos recordamos por lo que significó para la historia de la música, por su trágico final y porque a pesar de todo eso sigue vivo en la memoria de todos los que ya estamos en los 60.
Damian Gudik, Sabrina Cabrera y todo el equipo que montó y puso en marcha el NV teatro Bar ha logrado el objetivo, con un lugar hermoso, con buen sonido, buena ambientación y fantástica iluminación, de escenario y espacios generales, está más que logrado y es una nueva puerta que se abre para ingresar al arte y la cultura de la mano de esta inversión privada.
Un gran show, un gran lugar, que se disfruta y que recomendamos que visiten, porque vendrán más espectáculos y ahí debemos estar.
Armando Cabral
