El Decreto 107/2024, dictado el 31 de enero de 2024 por el presidente Javier Milei, se dispuso descongelar el componente tributario a los combustibles en sus dos modalidades: Impuesto a los combustibles líquidos (ICL) e Impuesto al dióxido de carbono (IDC).
Conforme al cronograma establecido, los pendientes del primer y segundo trimestres calendario del año 2023 se actualizaron a partir del 1° de marzo de 2024, en tanto que el tercer trimestre calendario del año 2023 se concretará el primer día del mes próximo.
Según lo analizado por el licenciado en administración y especialista en combustibles Cristian Bergmann, los impuestos, tanto para el gasoil como para naftas, escalarían 34,66 por ciento.
Para determinar el impacto en los surtidores, tomando como referencia los precios vigentes en CABA para nafta súper, y suponiendo que se trasladen en su totalidad, representará un aumento del 4,2 por ciento por litro vendido ($33.66). En el caso del gasoil Grado 2, el incremento en surtidor sería del 2,6 por ciento ($21.92).
“El nuevo esquema tributario continúa presionando a los precios, en un contexto en el cual el Gobierno Nacional intenta llegar a la paridad de importación para el combustible refinado”, expresó Bergmann a surtidores.com.ar.
630 POR CIENTO
Según estimaciones privadas, de febrero a mayo los impuestos a los combustibles subirán 630 por ciento. El dato corresponde al Instituto Argentino de Análisis Fiscal (IARAF), entidad que midió la incidencia del gravamen en el precio final, tomando como referencia a la ciudad de Córdoba, donde el valor es algo mayor.
Impuestos a los Combustibles: Precisan la incidencia final sobre el precio en el surtidor
Vale recordar que a través de la reforma tributaria de 2017, el componente impositivo se transformó de ad valorem (cuando se determina aplicando un porcentaje sobre el precio) a unitario (cuando se aplica una suma fija por unidad de venta o producción).
De acuerdo con la ley, el monto de estos impuestos específicos se debe actualizar trimestralmente por la variación que haya tenido el Índice de Precios al Consumidor durante el mismo período.
Sin embargo, y dado el contexto inflacionario, Alberto Fernández dispuso sucesivas postergaciones, pero la gestión de Milei comenzó a regularizarlos.