En una nueva audiencia del juicio contra el ex gobernador de Tucumán José Alperovich por abuso sexual, declaró como testigo la madre de la víctima, quien recordó las sospechas que tuvo mientras su hija trabajaba como asesora del ex senador denunciado: “Sabía que algo estaba pasando y era con José”, dijo María Claudia.
En ese contexto, el tribunal escuchó a María Claudia, madre de la joven F.L., quien denunció haber sido “violentada sexual, física y psicológicamente” por parte de Alperovich desde diciembre de 2017 hasta mayo de 2019, cuando ella trabajaba como asistente y secretaria del entonces senador nacional.
En rigor, la acusación se centra en los supuestos abusos sexuales perpetrados por Alperovich contra la joven tanto en sus oficinas en Tucumán como en la Ciudad de Buenos Aires. La imputación que se presentó en el juicio sostiene que el ex gobernador cometió estos actos “mediante abuso de poder y autoridad”, generando un sometimiento sexual ultrajante a la víctima.
“Sabía que algo estaba pasando y era con José”, recordó de aquellos años, cuando su hija daba muestras de estar “absorbida” por el trabajo al llevar “todo el tiempo el teléfono encima” y exhibir síntomas como la pérdida significativa de su peso y la caída del pelo.
“Cuando ella puede, cuenta porqué estaba como estaba; lo cuenta no solamente a mí sino a la familia. Manifestó todo sin contar detalles porque no es necesario. Es tremendo victimizarla y más siendo madre”, expresó la testigo en una sala de la planta baja del edificio judicial ubicado en la calle Paraguay 1536 de la Capital Federal.
Luego, al referirse a la denuncia presentada por su hija ante la Justicia, la mujer dijo: “Le creo y era una persona que estaba abusada por todos lados y la considero vulnerable”.
“¿Sabes con quién te metés?”, contó la madre que le preguntó a su hija al enterarse de su intención de recurrir a la Justicia. “Va a quedar en la impunidad, el poder de esa persona, todos los jueces de Tucumán los puso él”, le dijo en ese entonces.
El debate oral se extenderá entre tres y cuatro meses y tiene entre sus múltiples testigos al ex gobernador tucumano Juan Manzur. El primer día declaró el acusado, quien negó las acusaciones y afirmó que se trataba de una causa “armada”.
“Soy un hombre de 67 años, esposo, padre y abuelo. ¿Voy a arruinar mi vida a esta edad? Yo no abusé de ella”, manifestó frente a las miradas del fiscal Sandro Abralde, un fiscal auxiliar y la titular de la Unidad Fiscal Especializada de Violencia contra las Mujeres (UFEM), Mariela Labozzeta. También seguían sus declaraciones sus defensores Augusto Garrido y Mercedes Rodríguez Goyena.
La víctima, que hizo pública su denuncia a través de una carta donde expresó que su “tío segundo y jefe” fue el responsable de las violaciones a mi integridad física y sexual”, declaró frente al juez en una audiencia a puertas cerradas.
Según la causa, la joven F. L. comenzó a trabajar en la función pública de Tucumán en 2011 y seis años más tarde pasó a ser asistente y secretaria del entonces senador Alperovich. El segundo hecho ocurrió también en Puerto Madero, el 27 de diciembre de 2017, en el departamento de Alperovich. La denuncia sostiene que el 9 de febrero de 2018 Alperovich volvía con su sobrina de un acto de campaña en la localidad de San Pedro de Colalao y allí intentó abusarla. Lo mismo sucedió al día siguiente cuando volvían de Simoca y el 12 de ese mismo mes. Los hechos más graves ocurrieron durante el mes de marzo de 2018 en la casa que Alperovich tenía en la localidad de Yerba Buena, cuando cometió en cuatro días distintos hechos calificados como de abuso sexual con acceso carnal. La joven renunció el 24 de mayo de 2019.