a paritaria del 45% firmada por la Unión Obrera Metalúrgica (UOM) casi a principios del año fue uno de los temas determinante para decretar el final del liderazgo de Antonio Caló. La llegada de Abel Furlán tuvo como premisa recomponer salarios.
Justamente por esta demanda, se desató un grave conflicto en Tierra del Fuego que incluyó asambleas, manifestaciones y un paro por tiempo indeterminado. Sin embargo, la situación parece encaminarse, gracias a la propuesta de los empresarios de otorgar un aumento del 20%, más una suma fija no remunerativa de $45.000.
Después de semanas de alta tensión y con acusaciones cruzadas, los representantes de la Asociación de Fábricas Argentinas Terminales de Electrónica (AFARTE) decidieron elevar una propuesta a los dirigentes de la seccional Rio Grande de la UOM. Según se informó, al 45% ya acordado se agregarían 20 puntos divididos en tres cuotas: 35% de abril, 15% en julio y 15 en octubre, con revisión en noviembre.
Bono extra de 45.000 pesos
A esto se agregarían $45.000 a pagar en dos partes: $25.000 en los últimos días de mayo o principio de junio y $20.000 en la segunda quincena de junio. Todo en potencial, porque la dirigencia gremial lo pondrá en consideración de las bases para aprobarlo.
Cabe recordar que el acuerdo nacional en tiempos de Caló estableció como final del aumento octubre, con un básico de $95.828 que el propio Furlán consideró «insuficiente» apenas asumió la conducción de la UOM y reclamó a las patronales la urgente revisión teniendo en cuenta los índices inflacionarios que, en los últimos meses se fueron deteriorando.
En Tierra del Fuego, Federico Hellemeyer, el titular de AFARTE, rechazó en principio el pedido de aumento y reaccionó duramente contra las medidas de fuerza, amenazando con despidos «con justa causa». Ante la concreta posibilidad de un desmadre del conflicto, intervino el ministerio de Trabajo dictando la conciliación obligatoria, que fue fundamental para calmar las aguas.
Conflicto metalúrgicos: las partes se sientan a negociar
La magnitud de la disputa fue tal que la cartera laboral señaló la imperiosa necesidad de que las partes se sienten a negociar para mantener la «paz social». Asimismo, remarcó que «resulta necesario disponer las medidas pertinentes para promover una solución pacífica y legal al conflicto planteado, en el marco de las competencias de esta Autoridad» y dispuso la conciliación obligatoria.
El acuerdo en Tierra del Fuego podría replicarse a nivel nacional, ya que está en línea con lo que presente el consejo directivo que encabeza Furlán. El acuerdo que en su momento firmó Caló con las cámaras empresarias ADIMRA, FEDEHOGAR, CAMIMA, AFARTE, CAIAMA y AFAC consiste en una mejora del 45% en tres tramos: 18% en abril; 15% en julio y 12% en octubre.
La paritaria de Caló
Los porcentajes se aplican con salarios vigentes al 31 de marzo último. De esta forma, los mínimos quedaron en $77.984 en abril; $87.89 en julio y $95.828 octubre. Asimismo, el acuerdo establece una cláusula de revisión en noviembre.
La otra posibilidad es que a la paritaria ya establecida se le sumen porcentajes de aumentos en julio, octubre y noviembre con cláusula de revisión en revisión en diciembre.
El otro punto que analiza en nuevo consejo directivo es la situación de la obra social metalúrgica, hoy tercerizada. Las quejas de los afiliados y afiliadas se suman. Según explicaron, se revisarán los contratos y no se descarta una negociación para que el control del servicio de salud vuelva a manos de los metalúrgicos
