Detrás de una mascara de reducción de la cantidad de miembros del Concejo de la Magistratura lo que si hay claramente es una asignación a través de esta reasignación, de una mayoría de representantes políticos del oficialismo, que trabarían toda posibilidad en la conformación de quórum de enjuiciamiento y designación de jueces, así que esto es el tema central de discusión en la Cámara de Diputados
El gobierno nacional salió a defender ayer el polémico proyecto de reforma del Consejo de la Magistratura, mientras un sector del PJ bonaerense, en sintonía con dirigentes de la oposición, advirtió que de no haber modificación votaría en contra de la iniciativa. El oficialismo espera aprobar el proyecto en Diputados el próximo 22, confió el titular del bloque Frente para la Victoria, Agustín Rossi.
En defensa del proyecto, el ministro de Justicia, Alberto Iribarne, aseguró que «es parte de una reforma integral de la Justicia» para «tener más y mejor Justicia». Iribarne habló al abrir una jornada de debate en la Facultad de Derecho de la UBA, donde enfatizó que la reducción de los miembros del organismo —crea do en 1994 por la reforma Constitucional— «era necesario».
«Todas las encuestas muestran el descrédito del Poder Judicial que se inscribe en un descrédito de todas las instituciones, la dirigencia en general y los políticos en particular», afirmó.
En el mismo debate, el radical y ex ministro de Justicia, Ricardo Gil Lavedra, advirtió que el proyecto «viola la Constitución y es un retroceso serio».
En tanto, desde el PJ bonaerense, Juan José Alvarez advirtió que «si no se cambia el proyecto tendríamos que votar en contra». La postura de Alvarez es indicativa de fisuras en el duhaldismo, ya que el titular del PJ bonaerense, José María Díaz Bancalari, anima un alineamiento vertical con el kirchnerismo.