En la noche del 22 de octubre, mientras terminaba el recuento de la primera vuelta presidencial, el Juzgado Electoral de la provincia de Tierra del Fuego anuló 2.500 votos al partido Republicanos Unidos, próximo a Javier Milei, por haber impreso sus boletas a concejales de Ushuaia y Río Grande con una tonalidad de amarillo diferente a la que en principio correspondía. Cabe señalar que en esta provincia cada categoría tiene una boleta separada y se imprime con un color determinado.
Ante esta situación, el apoderado de Republicanos Unidos y diputado nacional electo, Santiago Pauli, presentó un recurso de queja el 30 de octubre ante la Corte Suprema, que ahora deberá decidir si da por válidos estos votos y le otorga al partido las dos bancas que le fueron quitadas la noche del 22 de octubre.
