Sobre la posible operación de ACUICULTURA DE SALMÓNIDOS en Tierra del Fuego, Argentina
01 01 La investigación y elaboración de este documento estuvo a cargo de: Alex Muñoz (National Geographic – Pristine Seas), Francisco Viddi (Centro Ballena Azul) y Ana Di Pangracio (FARN). Claudio Campagna (Presidente del Foro) y Alexandra Sapoznikow (Coordinadora) llevaron a cabo la edición y revisión del mismo, sumando los aportes de miembros de las organizaciones que integran el Foro para la Conservación del Mar Patagónico. ÍNDICE DE CONTENIDOS –
El Foro para la Conservación del Mar Patagónico y Áreas de Influencia 4 – Organizaciones 5 – Resumen Ejecutivo 6 – Introducción 6 – Antecedentes sobre acuicultura en ecosistemas patagónicos 7 – Impactos de la acuicultura de salmónidos 8 1. Escape de salmónidos, desde las jaulas de cultivo al ambiente natural 10 2.
Uso y abuso de antibióticos, antiparasitarios y otras sustancias químicas 12 3. Introducción y propagación de enfermedades y parásitos 14 4. Acumulación de residuos sólidos y líquidos 16 5.
Desechos contaminantes 17 6. Presión pesquera sobre especies silvestres para harina y aceite de pescado 18 7.
Interacciones negativas directas e indirectas con mamíferos marinos 20 – Reflexiones finales y recomendaciones 22 –
Apéndice Legal 24 Cita recomendada: Foro para la Conservación del Mar Patagónico y Áreas de Influencia (2018).
Documento de posición sobre la posible operación de la acuicultura de salmónidos en Tierra del Fuego, Argentina. Edición del Foro
RESUMEN EJECUTIVO
En la Argentina, la acuicultura no tiene la relevancia que ha alcanzado en otros países, incluso en la región del Cono Sur. Sin embargo, el contexto de desarrollo a nivel nacional está cambiando. Por un lado, se encuentra vigente la iniciativa “Innovación Acuicultura Argentina – INNOVACUA” gestionada por el Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación Productiva de la Nación (MinCyT), que ha firmado un acuerdo de colaboración y cooperación técnica con el Gobierno fueguino para instalar una granja multitrófica integrada para el cultivo de diversas especies marinas, entre ellas, truchas. Por otro lado, la República Argentina ha firmado recientemente un convenio con el Reino de Noruega para llevar adelante el “Proyecto de Acuicultura Nacional”, y evaluar la factibilidad del desarrollo de acuicultura basada en salmones en Tierra del Fuego
Link para ingresar al informe: https://marpatagonico.org/descargas/salmonicultura-TdF-Arg.pdf
El grave antecedente de la salmonicultura en Chile.
Chile el segundo mayor productor de salmones en el mundo -después de Noruega-, concentrando el 25% de la producción mundial, y el 82% del total exportado por la región.
Según datos del Departamento de Estudios del Servicio Nacional de Aduanas de Chile, en 2023 se exportaron 774 mil toneladas de salmón y trucha, un aumento del 3,1% respecto al año anterior. Así, esta industria sigue creciendo en Latinoamérica, con escasas regulaciones, pese a la presión de comunidades y grupo ambientalistas que buscan proteger los ecosistemas.
Solo Argentina, hace casi tres años, se convirtió en el primer país en prohibir la explotación de la industria salmonera en la provincia de Tierra del Fuego. Este hito marcó un precedente para la protección de los ecosistemas y dejó en evidencia lo devastadora que puede llegar a ser esta industria.
USO DE ANTIBIÓTICOS Y PRODUCTOS QUÍMICOS
Pero ¿de qué manera esta industria está afectando los océanos y a los animales del mar? Según el último estudio de Seafood Watch en 2021, del Monterey Bay Aquarium, que cada cinco años realiza una evaluación de sustentabilidad de la industria salmonera en el mundo, la producción de salmones en Chile fue calificada con nota roja, debido al alto uso de antibióticos y escapes –que alteran la biodiversidad nativa-, recomendando incluso a los mercados internacionales evitar su consumo.
Un estudio de Oceana, por su parte, sobre el uso de productos químicos y medicamentos en la salmonicultura en Chile, detalla que “para el cultivo de salmones se utilizan jaulas flotantes que contienen a los peces y que están abiertas al ambiente marino. Estas jaulas permiten el intercambio libre de nutrientes, enfermedades y químicos con las aguas que las rodean. Así, esta actividad productiva tiene un potencial significativo de afectar las aguas locales donde se realiza, y la fauna marina presente en ellas”.
El informe también menciona que “los principales productos químicos y medicamentos utilizados en la salmonicultura -que pueden tener consecuencias negativas sobre el medio ambiente o la salud humana- son los desinfectantes, los antiincrustantes, los antibióticos y los antiparasitarios”. Esto conlleva una preocupación medioambiental y sanitaria, además de efectos nocivos directos sobre la fauna marina y la biodiversidad.
Tal es el impacto, también para las comunidades del sur austral y para los mismos trabajadores de la industria, que en mayo de 2023, la Dirección del Trabajo en Chile interpuso 15 multas a empresas del rubro, por poner en riesgo la salud de los buzos. Según datos de la entidad, siete buzos han muerto en los últimos dos años, además de producirse decenas de accidentes no fatales al año.
En la fiscalización se verificaron las condiciones de higiene y seguridad de 20 centros de cultivo, y tuvo como resultado un total de 110 millones de pesos a empresas del rubro, en las regiones de Los Lagos y Aysén.
También en 2023, en la Región de Los Lagos se llevó a cabo una discusión por el funcionamiento de la industria salmonera, en la que organizaciones medioambientales y comunidades buscan poner fin a las operaciones de la industria del salmón en áreas protegidas, interpelando tanto a parlamentarios como a las empresas del rubro, a raíz del proyecto de ley que buscaba crear el Servicio de Biodiversidad y Áreas Protegidas (SBAP), que finalmente no pudo ver la luz.
Hoy en día, el 60% de los centros operativos de esta industria se concentra en reservas nacionales y forestales del sur de Chile, y con el SBAP hubiese sido posible eliminar todas esas operaciones, protegiendo así la biodiversidad y el medioambiente.
En mayo de 2023, una investigación de la Fundación Terram “denunció que nueve empresas habrían producido más de 67 mil toneladas de salmones por sobre lo autorizado en sus permisos ambientales, todo dentro de reservas nacionales en Aysén y Magallanes, y que si la Superintendencia del Medio Ambiente (SMA) no formula cargos, las infracciones comenzarán a prescribir en mayo de este año”, detalla un artículo del medio Inteferencia.
Sin lugar a dudas, todos estos hechos no son aislados, se trata de prácticas conocidas que siguen afectando al medioambiente, a los animales y a los seres humanos. Es por ello que celebridades del mundo del espectáculo han hecho eco de las necesidades de las comunidades, para que en un futuro se puedan tomar medidas tan concretas como las que implementadas en Argentina. En 2023, en el marco del Día Internacional de la Diversidad biológica, el vocalista de Pearl Jam, Eddie Vedder, ha hecho presión a través de sus redes sociales, para que en Chile se prohíban las operaciones en áreas protegidas.
Luego de conocer más sobre esta industria ¿te animas a dejar los peces y todos los productos de origen animal de tu alimentación? Nosotros te ayudamos, súmate a este movimiento y te enviaremos información, recetas y recursos durante todo un mes.
Cabe señalar que el proyecto de Ley Presentado por los legisladores de Republicanos Unidos, Coto y Graciania, tiene mucho del informe del Foro para la Conservación del Mar Patagónico y sus áreas de influencia.
Respecto del mismo proyecto el Legislador Matías Lapadula y queda claro en el texto, que «es una ley hecha a medida», esto se desprende de la lectura de los 61 artículos, donde los beneficios para inversores son mas que llamativos, como la indeterminada cantidad de años de que pueden hacer uso de las instalaciones después de 5 años, y por sobre todo desde el art 19 al 27 donde se pretenden eliminar todos los artículos que refieren a los controles de movimientos de fondos que integran la Ley 244, la derogación de la Ley 1355.

El proyecto lleva el nombre de Régimen de Acuicultura, Disposiciones generales. Autoridad de Aplicación.
El mismo en sus fundamentos es poco claro, muy breve y no incluye los antecedentes que han sido publicados por este medio, como lo ocurrido en Chile.
