Hace una semana exactamente publicamos una columna de opinión sobre el presupuesto provincial y nos preguntábamos en ese momento, porque se había proyectado un monto de más de 600 mil millones de pesos. Y la pregunta, no tenia que ver exclusivamente con el monto, sino de donde habían previsto semejante suma, como se había arribado a ese calculo y porque para una provincia de 200 mil habitantes se percibía en promedio, per cápita, por habitante, de mas de 300 mil pesos.
Obviamente sabíamos que la repercusión no iba a movilizar a las masas populares a sacer la cuenta, no tampoco a preguntarse si eso estaba bien o mal.
Lo cierto es que, 4 días después de esa nota, que esta publicada al pie, el conjunto de las provincias argentinas tomaba conocimiento de que lo que habían presupuestado ya no tenía ningún sentido, ¿Por qué?, bueno porque el ministro de Economía y candidato a presidente de la nación por Unión por la Patria, anuncio que el quite del impuesto a las ganancias que significa un ingreso de 1 billón de pesos, un millón de millones de pesos, significaba un recorte de la coparticipación federal del 57% y que ese recorte lo deberían asumir las provincias.
En el caso de Tierra del Fuego, que tiene cortada hasta la cadena de pagos a proveedores, la situación no puede ser mas compleja, sin embargo al igual que con el resto de los temas importantes desde el ejecutivo provincial no se ha dicho una palabra, ni siquiera de donde saldrán los fondos para cubrir este “AJUSTE” descarnado que implementa Sergio Massa desde su oficina en Buenos Aires.
Es claro además, que la quita del impuesto a las ganancias a mas de 800.000 trabajadores, implica también una equiparación de salarios con los de nuestra provincia, como bien lo explico Moisés Solorza, hablando por ejemplo de Vaca Muerta, donde por la misma actividad, por ejemplo en la industria petrolera los salarios son mayores que acá, los profesionales y técnicos de otras áreas pasaran por la misma situación, ingenieros, abogados médicos, técnicos superiores y demás profesiones pasan a cobrar lo mismo que acá y eso sin duda va a hacer que por lo menos, muchos piensen en la posibilidad de tomar otros rumbos, o quizá no, pero es una posibilidad.
Si a esto le sumamos que la separata que propone la quita gradual de beneficios a la 19640 esta incluida en el Presupuesto Nacional 2014, la incertidumbre crece aun mas porque nadie con poder de decisión da certezas sobre este grave antecedente, no solo económicamente hablado sino también desde lo geopolítico, la isla podría perder habitantes, empresas, servicios y otros tantos beneficios que hasta ahora, aun cuando algunos no se cubran, como el descuento del 21% de IVA, según la Juez federal Mariel Borruto, hacia que muchos siguieran eligiendo permanecer aquí, hoy la situación de crisis que sacude a todo el país, hace que fueguinos y fueguinas hayan comenzado a irse, uno de los destinos es Punta Arenas, donde muchos hijos de chilenos que viven aquí pueden sacar la doble ciudadanía e instalarse con muchas mejores condiciones que las que hoy se ofrecen en argentina en general y en Tierra del Fuego en particular.
Así las cosas y en otra etapa de oscurantismo, todas estas noticias que afectan directamente a los ciudadanos de esta provincia, no están en la agenda de las autoridades y ante la consulta, en algunos casos, la respuesta es, de eso no vamos a hablar por ahora.
El por ahora ya lleva mas de 9 meses, los problemas no se han solucionado, estos son hechos, no palabras, no son suposiciones, el ajuste, la devaluación, la inflación de 3 dígitos, 124%, están aquí y ahora paralizando la economía, provocando una caída estrepitosa del consumo, de la producción, salarios retraídos muy por debajo de la inflación, propuestas descabelladas como jubilar docentes de manera anticipada cuando no se les puede pagar ni a los que están jubilados, una jubilación acorde al costo de vida, todo esto esta pasando ahora y para colmo de males en los próximos días comenzara una nueva paritaria donde los trabajadores del estado están reclamando recomposición salarial, que aun nadie sabe de donde van a salir porque en esta provincia, como decíamos al comienzo, no hay un peso.
EL informe que publicamos a continuación nos evita agregar más a esta información.
Cambios en Ganancias: las provincias absorberán más del 57% de la pérdida de recaudación
Un informe estimó el “costo fiscal” para los “distritos subnacionales” en $577.600 millones, equivalente a 12 días hábiles de coparticipación. Qué pasó cuando Macri hizo algo similar en 2019, qué dijo entonces Alberto Fernández y por qué Kicillof ahora está a salvo
El cambio en el Impuesto a las Ganancias dispuesto por el gobierno mediante un decreto a partir de octubre, amén del envío al Congreso de un proyecto para hacerlo por ley y fijar un método de actualización a partir de 2024, tendrá en lo inmediato un costo fiscal de $577.600 millones para las provincias, estimó un informe privado, que también recordó cómo estas recurrieron a la Justicia cuando en 2019 el gobierno de Mauricio Macri, tras su derrota en las PASO, aumentó 20% el mínimo no imponible del impuesto y redujo a la mitad la alícuota del IVA sobre algunos alimentos.
Un brief de Aerarium, una consultora especializada en cuestiones fiscales, precisa que la suba de 152% del mínimo no imponible del tributo, llevándolo de $700.875 a $1.770.000 brutos y eximiendo el pago a unos 800.000 asalariados formales de los sectores de más altos ingresos de la población, tiene un costo fiscal cercano a un billón (millón de millones) de pesos.
De esa pérdida de recaudación, más del 57% recaerá sobre las provincias, pues se trata de un tributo coparticipable, a repartir entre la Nación y los 24 “distritos subnacionales” del país.
Costo fiscal
“Tomando como base un costo fiscal equivalente al 0,57% del PIB ($1 billón), el costo fiscal para el conjunto de Provincias y la Ciudad Autónoma de Buenos aires rondaría los $577.600 millones (USD1.650 millones), lo que representa el 57,8% de la pérdida total de recursos. En base a los envíos acumulados entre enero y agosto, el costo equivale a 12 días hábiles de transferencias, de modo que la pérdida directa sería equivalente a medio mes de coparticipación”, resume el informe.
“Al margen de la regresividad de la medida, dado que unos 800.000 contribuyentes de los deciles más altos de la pirámide de ingresos dejarán de tributar el impuesto, debe señalarse que el Gobierno Nacional condiciona unilateralmente a las provincias a financiar su campaña electoral, dado que más del 50% del costo fiscal deberá ser afrontado por dichas jurisdicciones y, en la mayoría de los casos , por sus municipios, a través de los regímenes provinciales de distribución”, dice otro pasaje del trabajo, que recuerda una situación similar en agosto de 2019.
Fuente: la licuadora/infobae