Meritocracia, mala palabra en Argentina.

Lun 21/09/2020.- Está claro que en los últimos tiempos hablar de meritocracia se ha convertido casi en un debate nacional y porque, bueno creo que en un país como este donde quienes no tienen ningún mérito, hablen de esfuerzo, sacrificio, talento, fuerza de voluntad, solidaridad, inclusión respeto a las normas, objetivos, planes, todo eso tan común a millones de argentinos, parece un cuento de ciencia ficción.

Como van a hablar de esfuerzo quienes nunca trabajaron, como van a valorar el sacrificio quienes nunca sacrificaron ni sacrifican nada, como van a hablar de premios y castigos, si siempre han nivelado para abajo, si al que se esfuerza u obtiene logros lo nivelan con el que se queda en su casa cobrando del estado sin hacer nada.

Me queda claro que para algunos la meritocracia es una palabra no solo desconocida, sino inaplicable cuando se navega en un mar de corrupción, cuando los beneficiados siempre son los mismos y cuando es necesario adoctrinar desde la más tierna infancia para el manejo adolecente de millones de jóvenes en este país. Cuando con el dinero de los que se esfuerza se premia los que no hacen ningún esfuerzo, cuando se premia al que me aplaude como una foca y se castiga al que trabaja, cuando el cargo se lo lleva el obsecuente y no el consecuente, cuando se usa a los que se esfuerza por un objetivo y se premia a los no fueron capaces de organizar ni aportar nada.

Hay que formarlos en la teoría del menor esfuerzo, del roba, pero hace, del no te metas, si este roba, yo también robo, si aquel coimea, yo coimeo, si aquel es legislador sin terminar la secundaria, yo para que voy a estudiar. Si se hizo rico viviendo del estado, porque voy a ir a la universidad. Ese es el que ni siquiera lava los platos después de cada comida, ese es el que de adulto no sabe de qué vivir, pero si sabe cómo conseguir planes y seguir la corriente de vivir sin trabajar.

No es extraño entonces que, en este país, muchos se esfuercen y jamás sean reconocidos, y muchos mas no hagan nada y sean quienes gobiernan. El Dr. René Favaloro es un claro ejemplo, de esfuerzo, sacrificio y entrega por este país, sin embargo, se suicidó porque este país le negó una ayuda, a una de las más grandes eminencias de la medicina en el mundo. Alguien puede decir que no se sacrificó, que no se esforzó, que no dejo su vida en un quirófano.

No es extraño que en este país se combata la producción agropecuaria que es un trabajo muy sacrificado y es lo que sostiene la economía destrozada por décadas de manejo de “los mejores”, obviamente autocalificados, ya que nadie les reconocería todos esos méritos que se autoadjudican.

Seguramente sus padres como los míos les dijeron alguna vez “yo no mantengo vagos”, trabajas o estudias, y trabajamos junto a nuestros padres, y después en lo que conseguimos porque había que hacerlo, porque si queríamos plata la única forma de conseguirla era trabajando y trabajar en el campo no es lo mismo que atender un comercio o ser empleado del estado, solo por poner un título, porque yo entiendo que un empleado trabaja y si los 20 millones de empleados públicos que tiene este país lo hicieran seriamos una potencia.

Que nos pasó que perdimos ese horizonte de esfuerzo y sacrificio para salir adelante, para tener un ingreso digno, para vivir dignamente y no con 18 millones de planes sociales. Porque hoy en este país hay millones de niños sin agua, sin cloacas, sin gas, que pasó con aquello de rendir un concurso para obtener un puesto, después un ascenso y así completar una carrera administrativa.

La siguiente aclaración vale la pena tenerla en cuenta para aclarar aun un poco más el significado de meritocracia.

¿Qué es y que no es la meritocracia?

La meritocracia es un sistema basado en el mérito. Esto es, las posiciones jerarquizadas son conquistadas con base al merecimiento, en virtud, del talento, educación, competencia o aptitud específica para un determinado puesto de trabajo. La sociedad meritocrática suele integrar el concepto de talento con esfuerzo.

¿Qué quiere decir la palabra mérito?

Mérito, del latín merĭtum, es la acción que convierte a una persona en digna de un premio o de un castigo. El mérito es aquello que justifica un reconocimiento o un logro o que explica un fracaso. Puede entenderse como mérito al resultado de las buenas acciones de una persona. …

Como verán no es un adjetivo que se le pueda aplicar a muchos, esto abarca desde la capacitación, la constancia, fuera de voluntad, hombría de bien, talento, inteligencia, sacrificio, solidaridad e inclusión, una palabra tan embarrada en boca de quienes jamás la aceptaran sencillamente porque no tienen ninguno de los méritos anteriores para estar donde están, mi padre me dijo una vez, “nunca aceptes como jefe a alguien que no sea más inteligente que vos”.

Hoy entiendo el significado de aquellas palabras, pero creo que es muy tarde, para mí y para millones de argentinos que seguimos trabajando, estudiando, esforzándonos todos los días, siendo consecuentes, sin esperar un premio, ni un reconocimiento porque aquí el que sabe, sabe y el que no sabe es jefe.

Armando Cabral

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