En febrero nuestras exportaciones a Brasil treparon 3,2% i.a., acumulando cuatro meses consecutivos de subas en términos interanuales. Las ventas a nuestro principal socio fueron impulsadas por las colocaciones de trigo, maíz, ómnibus y aceite de soja (el total vendido llegó a casi US$ 640 millones). Sin embargo, no pudieron contrarrestar el fuerte crecimiento de las importaciones desde Brasil: en febrero treparon 18% i.a. superando los US$ 1.270 millones. Vale destacar que, pese al aumento de nuestras exportaciones a Brasil, se perdió presencia en dicho mercado puesto que el resto de las importaciones brasileñas avanzaron 6% i.a. En consecuencia, la participación argentina en las compras externas de nuestro principal socio comercial cayó 0,2 p.p. en relación a febrero de 2016, ubicándose en 5,8% del total.
De cualquier manera, en el primer bimestre de 2017 las exportaciones a Brasil saltaron 19% i.a. (rozaron US$ 1.320 millones), de modo que en lo que va del año se logró ganar participación en dicho mercado: las exportaciones argentinas pasaron de representar 5,4% sobre el total de las compras al exterior del gigante latinoamericano en enero-febrero 2016, a 5,7% en igual bimestre de este año (el resto de las importaciones brasileñas trepó “tan sólo” 11,5% i.a. en este período).
Sin embargo, dado que las importaciones crecieron 21% i.a. en el primer bimestre de 2017 (superando US$ 2.300 millones), el déficit en el intercambio bilateral con Brasil se profundizó en casi US$ 200 millones (+24% i.a.) acumulando en los dos primeros meses del año un rojo de casi US$ 1.000 millones.
Por último, el flujo de comercio bilateral de febrero superó los US$ 1.900 millones, lo que representa un salto de 13% i.a. en relación a igual mes del año pasado y marca un avance de 7% al contrastar con el segundo mes de 2015. Este resultado se torna aún más promisorio en el primer bimestre: la suma de exportaciones e importaciones con Brasil trepó 21% i.a. y 6% al comparar con los primeros dos meses de 2015. La intensificación de las relaciones comerciales bilaterales es un aspecto a profundizar, ya que ambas economías se potenciarían al ensanchar sus mercados y obtener ganancias de escala, que redundarían en mejoras de la competitividad más allá de la cuestión cambiaria.