Carta de la Legisladora Andrea Freites a los militantes peronistas.

Como muchos de ustedes  conocerán, problemas de salud impiden mi presencia en este acto, pero no por eso quería dejar de participar enviándoles un saludo y un caluroso abrazo en este día tan especial para todos los peronistas. El 17 de octubre de 1945 es fundacional para nuestro movimiento y no es una casualidad que… Leer más »

Como muchos de ustedes  conocerán, problemas de salud impiden mi presencia en este acto, pero no por eso quería dejar de participar enviándoles un saludo y un caluroso abrazo en este día tan especial para todos los peronistas.

El 17 de octubre de 1945 es fundacional para nuestro movimiento y no es una casualidad que la historia lo haya denominado el Día de la Lealtad, una lealtad que no tiene una sola dirección ya que se podría entender en principio, como la lealtad del pueblo trabajador con su líder, Juan Domingo Perón, pueblo que  fue a pedir por su libertad, que fue a pedir por él.

Espontáneamente la movilización y huelga prevista para el 18 de octubre se adelantó porque la fuerza incontenible del pueblo, que desde todo el cono urbano bonaerense comenzaba a dirigirse a la Plaza de Mayo, sobrepasó cualquier especulación y planificación. Tan sorprendente y masiva que el líder tuvo que pedir a la multitud que entonara el himno nacional para darse tiempo para pensar qué decir ante semejante demostración de poder político popular.

La otra lealtad, la del líder con su pueblo, ya se venía construyendo desde su participación desde el gobierno en la ampliación y el reconocimiento de los derechos de los trabajadores y se amplió mucho más luego durante sus presidencias. Es ahí donde esa doble lealtad selló una alianza hacia el futuro que aún continúa intacta y que permitió enfrentarse a los poderes a los cuales les disgustaba que los” cabecitas negras”, accedieran a un trabajo digno, a la vivienda, al aguinaldo, a las jubilaciones, que los peones rurales dejaran atrás la servidumbre, que los trabajadores y sus familias pudieran acceder a beneficios que antes tenían vedados, que eran exclusivos de las clases altas.

Esa alianza continúa intacta, porque el pueblo no es tonto, pero los poderes que se vieron afectados han recuperado fuerzas, por eso en nombre de esa lealtad que no sólo es un sentimiento sino, como dice nuestra marcha, es “realidad efectiva”, el peronismo tiene como deber mantenerse unido y construir más unidad. Cualquier otra alternativa solo hará retroceder al pueblo en sus conquistas y transformará, a quienes haciéndose pasar por peronistas, en aliados funcionales de nuestros enemigos.

POR LA UNIDAD DE TODO EL PERONISMO

POR UNA PATRIA LIBRE, JUSTA Y SOBERANA

POR PERÓN Y EVITA

FELÍZ DÍA DE LA LEALTAD

Compañera Andrea Freites –

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