El diputado Felipe Solá confirmó esta tarde su renuncia al bloque kirchnerista y la conformación de una nueva bancada con otros justicialistas parados en la vereda opositora, como los que responden a Eduardo Duhalde y a Adolfo Rodríguez Saá. Fue en el mismo Congreso que ahora lo verá enfrentado al oficialismo, del que afirmó: «No hay libertad de opinión».
Durante la presentación del grupo de legisladores que lo acompañará, Solá aseguró que «el peronismo está buscando otra representación». Y lanzó: «No hay libertad de opinión en el peronismo» y que en «la Argentina de hoy existe temor político a que no se cumpla con compromisos asumidos en términos de transferencias financieras» con las provincias.
A Solá lo acompañaron, entre otros, los diputados Jorge Sarghini (Buenos Aires) y Enrique Tomas (Mendoza).
El derrotero de la relación de Solá con el kirchnerismo tuvo momentos de sintonía hasta el punto de los sacrificios personales (cuando el bonaerense era gobernador rehusó avanzar con la búsqueda de una reelección por pedido del entonces presidente Néstor Kirchner) y de cruces muy duros (el ultrakirchnerista Carlos Kunkel fue registrado por las cámaras de TV cuando insultaba a Solá en el recinto en plena discusión por las retenciones móviles).
Ahora, tras el anuncio oficial de la ruptura, la primera actividad de Solá será todo un gesto: hablará mañana en el Movimiento Productivo Argentino (MPA) que dirige Eduardo Duhalde, lo que configurará un acercamiento entre ambos dirigentes bonaerenses.
Fuente:Clarin.com.ar