Pero hay alguien que ni siquiera debería atreverse a opinar sobre esta situación y me refiero concretamente a quien esta sentado en la presidencia de la Cámara Legislativa de la Provincia, nada más y nada menos que el vicegobernador de la Provincia, Hugo Omar Coccaro.
El mismo Coccaro que durante la campaña anunciaba que iba a ser el complemento ideal para una persona hiperquinetica como Jorge Colazo.
El mismo que hizo lo imposible para llegar ahí, llegar para que?, no ha habido una sola frase que saliera de la boca del vicegobernador que tuviera como contenido el apoyo, el consenso, el acompañamiento, a la gestión de gobierno. No hizo nada, se encerró en su despacho de Ushuaia o en su casa de Rio Grande, a la espera de que todo se derrumbe para salir después con su actitud imperturbable a juntar los pedazos de lo que el mismo ayudo a romper.
Coccaro no hizo nada, no aporto nada y ni siquiera se comprometió con esta situación. En mi modesta opinión debería llamarse a silencio y hacer lo que debió haber hecho cuando decidió abandonar su responsabilidad institucional. Debe irse a su casa.
Desaparecer por el bien de todos aquellos a los que esta democracia les costo la vida, por la dignidad, por el respeto, por la grandeza de los que saben pedir disculpas y decir me equivoque, asumir su responsabilidad.
Nadie puede estar feliz por esta situación, Colazo quizá vaya a juicio político, pero los juzgados son mas de 100.000 personas que tampoco se hicieron cargo de nada, que solo han exigido, sin respetar tiempos, instituciones, investiduras, sin calcular las consecuencias.
El juicio político es en realidad un cartel que nos tilda de irresponsables, de inmaduros, de desinteresados, como dijo Enzo Filoza, esto demostrara que somos una banda en referencia a las razones de fondo de esta situación, que el ubica en tires y aflojes por el botín de un presupuesto de mas de 1000 millones de pesos Tierra del Fuego no se merece esto y cuando digo esto no me refiero exclusivamente al gobierno de la provincia, sino a la sociedad fueguina en su conjunto.
A los hipócritas que criticaron al gobernador y fueron a pedirle trabajo, a los que acomodaron a sus parientes y después mandaron mail despedazándolo, a los cobardes que no dan la cara y se amparan en mensajes para seguir viviendo de la teta del estado, a los que extorsionan a través del micrófono, a los que hoy a escondidas se alegran por una situación de la que son corresponsales, a los vivos que solo les intereso llenarse de plata mal habida sin tener en cuenta que hundían a la provincia no a una persona, a los que creen que con esto perjudican a un hombre y no a una provincia. A todos ellos mi mas absoluto repudio.
El gobernador puede ser responsable de muchos errores o irregularidades, seguramente se encontraran fundamentos para esto, pero insisto no hagamos leña del árbol caído, porque todos tenemos nuestra cuota de responsabilidad.
Ni que hablar de la oposición política que mezquinamente, no tuvo presencia durante este año y medio y de repente comenzó a sacar una tras otra denuncias de todo tipo. Los que no cogobiernan, los que no acompañan los que no se comprometen, los que todo lo critican, los que jamás hicieron nada para acercarse en fin, que mas que ustedes no sepan.
Aquí estamos y ahora que?. Lo que venga también es responsabilidad de todos. Nada me hace suponer que vaya a ser mejor mientras todos sigamos mirando para otro lado.
Ahí están todos los que me canse de criticar, de denunciar y a los que la sociedad les sigue perdonando la vida,l los resucita una y otra vez y hoy tienen el poder en sus manos, vuelven los Loffler, los Sciutto, Saladino, Nely Manfredotti, Raúl Ruiz, ellos pueden juzgar a alguien?, si pueden porque esta sociedad los voto para que cumplan ese rol entonces de que nos quejamos?.
Se han cansado de acomodar las reglas para ser siempre los mismos y ustedes donde estaban? Que hicieron durante los 4 años anteriores, aquellos de la policía represora? de los ataques a la prensa, de los descuentos salariales, de los aprietes, los que vaciaron el banco, los que negaron a Rio Grande, los que desaparecían sin dar la cara, los del taxi Lear jet, los de la ostentación, no fue Loffler el que entro a una radio a romper todo, insultando y amenazando. No son los mismos que votaron todo eso los que hoy se erigen en conductores de la provincia. No cobijo este gobierno a Mario Daniele y lo banco a muerte, de donde viene?, quien lo hizo senador nacional?, el pueblo etiope???.
No hay excusas, no hay reclamo, somos responsables de todo lo que nos pasa. Dejemos de mirar para otro lado y de echarle la culpa al otro, llego la hora de dar la cara, de jugarse, de opinar y de hacerse cargo.
Armando Cabral
07/09/05
