Mujeres que contratan mujeres: el efecto #NiUnaMenos
Mart 13/03/18.- Analía Suárez todavía recuerda cuando dejó entrar a un cerrajero a su casa. Vivía sola, había perdido las llaves y en la desesperación por entrar al departamento llamó al encargado. Al rato llegó con un colega «amigo» que sabía de cerraduras. No bien llegó, algo de él no le gustó. No sabe explicarlo. Pero en los 20 minutos que estuvo parada junto a él se sintió muy incómoda. «Recién me tranquilicé cuando el hombre se fue. Ahí respiré aliviada», reconoce Analía, describiendo las sensaciones que muchas mujeres experimentaron alguna vez.