Desde el sur
En Tierra del Fuego, la seccional del gremio UOCRA advirtió que la desocupación en el sector es alarmante. Julio Ramírez, secretario general, remarcó que el desempleo ronda el 80% y que se debe, en gran parte, a la paralización de la obra pública desde la asunción del actual Gobierno. «Las obras públicas están paradas totalmente, la verdad que es un desastre todo. La responsabilidad viene de la Nación, por eso no se está haciendo nada en la provincia, no se está moviendo nada. El municipio hace lo que puede en Río Grande y el Gobierno provincial no puede empezar una obra. La verdad, está todo parado, nadie hace nada, ninguno se preocupa por nada», afirmó a Diario Provincia 23. «Los compañeros están cortando el pasto, tratando de hacer algo. Nadie se preocupa, la mayoría acá confiaba en este Gobierno y ahí está como nos pagaron», manifestó.
Desde la Cámara de la Construcción de Tierra del Fuego, el empresario Daniel Wallner, sostuvo que la temporada fue el sector tuvo una actividad tranquila, centralizada en viviendas que pasaron de la Nación al gobierno provincial. «Fue en lo único que se pudo trabajar, se retomaron las obras en septiembre y se trabajó en función de la disponibilidad presupuestaria del Instituto Provincial de la Vivienda», detalló en Radio Provincia. «El IPV se hizo cargo de la plata que prometió Nación por los certificados que se debían. Los pagó con los pocos fondos que tiene disponibles, con cierta demora, pero se pagó», dijo.
Wallner detalló que «se trabajó a un ritmo que no fue el deseado pero permitió mantener algunos puestos en las obras». «Estamos terminando los trabajos que se podían hacer y ya estamos en el invierno, así que el ritmo va a bajar. No sabemos cómo vamos a seguir la temporada que viene y hay una total incertidumbre», señaló.
En Chaco no arranca
El secretario general de la UOCRA de Chaco, Ariel Ledesma, alertó sobre la grave situación laboral que atraviesa el sector, en donde más del 60% de los trabajadores se encuentran desocupados o han tenido que abandonar el rubro por falta de oportunidades, dijo. Aseguró que en esa provincia, solo cerca de 4.000 trabajadores están ocupados, una cifra muy por debajo de los niveles históricos del gremio. «En los peores momentos manteníamos al 55% o 60% de ocupación pero hoy estamos al revés: tenemos un 60% de desocupación», afirmó en declaraciones a Diario Norte.
El dirigente señaló que hay un paralelismo directo entre la caída de la obra pública y el impacto en la sociedad. «Primero nos golpeó a nosotros con el desempleo pero ahora la sociedad lo siente. Las rutas están destruidas, las escuelas sin mantenimiento y las infraestructuras se deterioran», remarcó. Para Ledesma, el panorama general es de abandono y cuestionó que el Gobierno apueste a una economía sin inversión en obra pública.
Para Ledesma, urge que la Nación y el gobierno provincial trabajen con los sectores productivo, el industrial y de la construcción. «Cuando la construcción se activa, mueve todo, desde la carnicería del barrio hasta el corralón. Es la rueda que enciende el consumo real», afirmó. «Si no hay políticas claras para reactivar la construcción formal es imposible que salgamos adelante», advirtió.