El Gobierno convocó para el próximo 8 de enero a una audiencia pública para definir nuevos aumentos en las tarifas de gas y aplicar hacia adelante un índice de actualización mensual para las boletas. Los incrementos en los servicios públicos serán fundamentales para el ajuste fiscal que propone el Ministerio de Economía. Además, tratarán la reversión del Gasoducto Norte, una obra clave para el abastecimiento energético de cara al próximo invierno y una de las mayores preocupaciones de las empresas.
El artículo uno de la Resolución consigna que se buscará el 8 de enero una adecuación transitoria del precio del gas, transporte y distribución por redes del fluido. Esos ítems, junto a los impuestos, son los que conforman el precio de las boletas que llegan a los hogares de los consumidores.
Otros dos puntos en agenda son: “Tratamiento de la incidencia del costo del flete y/o transporte de Gas Licuado de Petróleo (GLP) respecto de las localidades abastecidas con gas propano/butano indiluido por redes y tratamiento de la incidencia del precio del gas en el costo del gas natural no contabilizado (GNNC)”.
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El Gobierno busca un recorte en los subsidios de luz, gas, transporte y agua.Subsidios en la mira
Para el nuevo Gobierno, uno de los puntos clave en el recorte del 2,9 puntos del PBI en el gasto público que esperan llevar adelante en 2024 son los subsidios económicos. En concreto, esperan un recorte de 0,7 puntos del PBI en esa partida, en la que la mayor parte se la lleva la asistencia a las tarifas de energía mientras que el resto es de transporte y agua.
En el equipo económico de La Libertad Avanza saben que esa quita de subsidios deberá ser gradual en medio de una situación social que tenderá a empeorar ante la fuerte aceleración inflacionaria que se espera para los próximos meses. La intención, tal como explicó Caputo, es que la asistencia migre hacia la demanda pero no está definido cuál será el mecanismo para alcanzar ese objetivo.
Reversión del Gasoducto Norte
En la Resolución del Enargas también se adelantó que uno de los temas a tratar en la próxima audiencia será la reversión del Gasoducto Norte. Entre los empresarios locales, incluso de importantes compañías multinacionales que operan en el país, hay suma preocupación porque no continúe la obra debido a su importancia para el abastecimiento energético para el próximo invierno. Es que desde julio Bolivia ya no estaría en condiciones de enviar a la Argentina fluido. Pero en
Estado el que tiene que poner los USD100 millones que faltan, ya que la CAF puso USD540 millones y la Argentina había comprado materiales por otros USD 70 millones. La obra es para poder conectar la red de gasoductos de Vaca Muerta a Córdoba, Tucumán, La Rioja, Catamarca, Santiago del Estero, Salta y Jujuy, más la posibilidad de exportar hacia el norte de Chile, al centro de Brasil y a Bolivia. Divisas que serán necesarias para el Banco Central a lo largo de 2024.
