El juez federal Guillermo Montenegro elevó hoy a juicio oral un expediente abierto el 30 de diciembre de 1996, cuando la asociación Abuelas de Plaza de Mayo denunció que la sustracción de niños había constituido una práctica sistemática de las Fuerzas Armadas en la dictadura del período 1976-83.
El entonces juez Adolfo Bagnasco abrió entonces la primera causa que investigó el robo de niños como un delito organizado por el aparto represivo, y por los crímenes contra menores retornaron a prisión, luego de ocho años en libertad, los ex comandantes Jorge Videla y Emilio Massera, que sin embargo no compartirán el banquillo con Bignone y Nicolaides.
Videla, antes de que Bagnasco ordenara su arresto, había sido detenido por orden del ex juez de San Martín Roberto Marquevich, por lo quedó sujeto a un sumario que tramita por cuerda separada -también por el robo de bebés-, y Massera fue declarado mentalmente insano para afrontar un juicio, a causa de sus problemas de salud.
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Fuente: Télam y DyN
