La disputa entre las marcas más populares de la Máxima, es tan antigua como la historia del TC misma. En 1939 Ford se quedó con el primer campeonato de la categoría a través de Angel Lo Valvo. Para no ser menos, Chevrolet ganó los títulos de 1940 y 1941 de la mano del gran Juan Manuel Fangio.
Así, desde los tiempos de las viejas cupecitas su fue formando el Súperclasico del automovilismo argentino. El Chueco de Balcarce representó a Chevrolet durante la década del cuarenta hasta su migración a Europa, donde luego se consagró mundialmente en la Fórmula 1. Mientras que los hermanos Gálvez marcaron un hito en la historia de Ford y el TC: con nueve títulos de Juan y cinco de Oscar, los Gálvez fueron los dueños del Turismo Carretera entre 1947 y 1960.
En la historia más reciente de esta rivalidad de marcas, mención aparte merece Juan María Traverso. Ya en la etapa del Falcon y la Chevy, el Flaco ganó seis campeonatos en el TC, con la particularidad de que tres los consiguió con Ford (1977, 1978 y 1999) y tres con Chevrolet (1995,1996, 1997).
Mientras tanto, con el reciente título de Juan Manuel Silva, Ford sumó el título número 36 en su historia, 23 más que los conseguidos por Chevrolet, que a finales de la década del noventa y principios del 2000 vivió su etapa de gloria con las cuatro consagraciones de Guillermo Ortelli, en 1998, 2000, 2001 y 2002.
Actualmente, Ford y Chevrolet representan más del 80 por ciento del parque de autos del Turismo Carretera. De los 85 pilotos que integran el ranking de la Asociación de Corredores de Turismo Carretera (ACTC), 33 corren con Ford y 29 con Chevrolet. Una muestra clara del dominio de ambas marcas en la categoría.