El ex policía federal y represor Juan Antonio del Cerro, conocido como ‘Colores’ en los grupos de tareas de la dictadura, deberá afrontar un juicio oral por violaciones a los derechos humanos. La medida, dispuesta por el juez federal Daniel Rafecas, marca el mismo sendero para otros cinco militares.
Con estas medidas, Rafecas le dio una clausura parcial de la instrucción a la denominada megacausa del I Cuerpo del Ejército, reactivada tras la anulación de las leyes del perdón, hoy ya invalidadas por la Corte Suprema, en el Congreso.
Ahora, la causa pasará a la Cámara de Casación para que se sortee el Tribunal que habrá de sustanciar el juicio. En la misma situación que Del Cerro se encuentran un general, dos coroneles y dos brigadieres.
De las actuaciones judiciales se desprende que ‘Colores’ Del Cerro «era especialista en la aplicación de corriente eléctrica como método de tortura» y que «integraba las ‘patotas’ encargadas de realizar los secuestros y de interrogar a los detenidos».
Los otros que deberán sentarse frente al Tribunal son el general de brigada Héctor Rubén Gamen, los coroneles Pedro Durán Sáenz y Alberto Pedro Barda y los brigadieres Hipólito Rafael Mariani y César Miguel Comes. Todos ellos recibían formaban parte del grupo liderado por el ex general Guillermo Suárez Mason, ya fallecido.
A todos se les imputa la «imposición de tormentos en forma reiterada» mientras que a Barda se le agrega una acusación por «homicidio agravado por alevosía» en dos hechos.
La Cámara Federal, en 1987, había decretado la «prisión preventiva rigurosa» de los seis, pero la sanción de las leyes de Obediencia Debida y Punto Final posibilitó que recuperaran su libertad hasta que la ley 25779 declaró «insanablemente nulas» esas normas de impunidad.
