La ceremonia en que Ríos pronunciará el tradicional discurso ante la asamblea legislativa se iba a llevar a cabo como todos los años en la Casa de la Cultura de Ushuaia.
Sin embargo, el intendente Federico Sciurano (UCR) resolvió no ceder el edificio debido a sus reducidas dimensiones en relación con la movilización sindical prevista para ese día.
En su lugar, Sciurano le ofreció al gobierno realizar el acto en el Polideportivo Municipal, situado a pocos metros de allí, y que cuenta con mayores condiciones de seguridad para albergar público.
No obstante, la gobernadora fueguina optó por desistir de esa posibilidad y programó el evento en la sede natural de la Legislatura, un edificio alquilado con poco lugar para el público y donde supo funcionar un restaurante, situado en la calle Yaganes y Héroes de Malvinas de la capital provincial.
En rigor, la convocatoria oficial para el viernes a las 10 fue realizada por el vicegobernador Roberto Crocianelli, presidente del Parlamento, quien también citó para el jueves a las 11 a la sesión preparatoria donde se elegirán las autoridades del cuerpo para este año.
Debido a las características del lugar, el Gobierno fueguino anunció un operativo de seguridad que incluirá cientos de policías y cortes de varias calles aledañas.
Las manifestaciones gremiales convocadas para el viernes incluyen a la Unión Obrera Metalúrgica de Río Grande, cuyos integrantes protestarán por la aprobación de una suba de impuestos producida en diciembre pasado, y al Sindicato Unificado de Trabajadores de la Educación Fueguina (SUTEF), que mantiene un conflicto salarial con el Ejecutivo.
También se prevé una movilización del Sindicato de Petroleros Privados cuyos dirigentes solicitan la aprobación legislativa a un proceso de renegociación de contratos que lleva adelante la gestión de Ríos con empresas del sector, y no se descarta, además, una protesta de empleados públicos nucleados en la Asociación Trabajadores del Estado (ATE) que piden un aumento de sueldos
Fuente: Télam
