La empresa London Supply afirma que no es kirchnerista y que sus negocios se remontan a 1942, cuando José Taratuty se lanzó como proveedor marítimo.
Eduardo Taratuty, su nieto apodado ‘Teddy’, hoy controla una compañía que tiene diversas actividades:
> Duty Free de Río Grande y Ushuaia (Tierra del Fuego) y Puerto Iguazú (Misiones)
> Administración de las terminales aéreas de El Calafate (Santa Cruz), Ushuaia (Tierra del Fuego), y Trelew (Chubut). Hasta 2004 tuvo la de Merlo, en San Luis.
> Terminal lacustre (Puerto Pañuelo, lago Nahuel Huapi), en San Carlos de Bariloche (Río Negro)
> La empresa de aviones privados Pacific Ocean (que posee y opera la siguiente flota: Lear Jet 60, Lear Jet 31, Lear Jet 35 A, y Beechcrat Baron BE 58 P.
> Zona Franca de Puerto Iguazú (Misiones).
> Proveeduría marítima en Concepción del Uruguay, Campana, Buenos aires, La Plata, Mar del Plata, Necochea, Bahía Blanca, Puerto Madryn, Aan Antonio Oeste, San Pedro, San Nicolás, Villa Constitución, Rosario y San Lorenzo.
> Distribución mayorista en Tierra del Fuego y Antártida (Área Aduanera Especial). Se supone que esta actividad incluye su concesionario Subaru en Tierra del Fuego.
Pero Taratuty está en las noticias
> por S.A. Searen, empresa propietaria del inmueble en que vive Amado Boudou en Madero Center, Puerto Madero. La relación entre Searen y Taratuty es su sobrino, Miguel Castellano. Searen es una empresa presidida por Daniel Jorge Razzeto, presidente del club Quilmes hasta 2006 y hoy vicepresidente, detrás del senador nacional Aníbal Fernández; y
> porque London Supply aportó el dinero necesario a The Old Fund para que el insolvente, en teoría, Alejandro Vandenbroele, titular del fondo de inversión ya liquidado, pudiera levantar la quiebra de Ciccone Calcográfica.
Por ahora, el Ejecutivo Nacional sigue a la deriva en el escándalo que involucra al compañero de fórmula de Cristina Fernández, el vicepresidente de la Nación, Amado Boudou, ex ministro de Economía y ex director de la ANSeS.
La investigación ha acumulado sospechas de irregularidades y también expuso la fragilidad jurídica de la operación montada en días de Néstor Kirchner, y aprobada por el entonces diputado nacional -motivo por el cual Cristina Fernández defiende a capa y espada a Boudou, más allá de otras cuestiones como el bochorno porque fue ‘su candidato’ o el regreso a escena de Julio Cobos reprochando a Cristina la situación-.
Queda en duda qué conocía Cristina con anticipación al escándalo acerca de la kirchnerización de Ciccone.
Acerca de London Supply, que intenta escapar del escándalo, Hugo Alconada Mon escribió en el diario La Nación:
«Seis días. Ese fue el tiempo que le tomó a la empresa London Supply recuperar los casi 2 millones de pesos que depositó ante la Justicia para ayudar al abogado Alejandro Vandenbroele a levantar la quiebra de Ciccone Calcográfica. Pero con una salvedad: el dinero lo aportó en el expediente y el reintegro lo cobró por fuera, sin que se enteraran el juez ni el síndico, ni los acreedores que buscaban cobrar, según surge del escrito que presentó días atrás la propia empresa ante el fiscal federal Carlos Rívolo y de fuentes empresarias y tribunalicias a las que consultó LA NACION.
El aporte millonario se concretó el 10 de septiembre de 2010, luego de que uno de los accionistas principales de London Supply, Miguel ‘Mickey’ Castellano, llegó a su empresa con «una propuesta de negocios», según confirmaron desde la propia empresa que lidera su tío, Eduardo ‘Teddy’ Taratuty. Les ofrecían comprar acciones en la ‘nueva’ Ciccone. Pero algo ocurrió y el 16 llegó el cheque con el reintegro. Es decir, ocho días antes de que el juez en lo Comercial Javier Cosentino decretara el levantamiento de la quiebra.
Castellano es, tal como reveló este diario semanas atrás y confirmaron desde London Supply, amigo cercano de Juan Bautista Boudou, uno de los hermanos del entonces ministro de Economía, a quien también conoce desde hace décadas. Desde sus tiempos comunes en Mar del Plata. Pero desde su empresa se negaron a detallar quién le llevó a ‘Mickey’ el posible negocio.
Según London Supply, la secuencia fue la siguiente: alguien (cuyo nombre callan) le propuso a Castellano quedarse con parte de las acciones de la «nueva Ciccone», el empresario aportó $ 1,8 millón como compromiso o reserva y sólo luego consultó la opinión legal de sus abogados. Estos objetaron la operación, por lo que se abrieron y recuperaron su dinero. (…)».
En tanto, el diario Clarín continuó su puja con Ricardo Echegaray, el titular de la AFIP. No solamente hay cuentas pendientes ahí, por la hostilidad del organismo recaudador para con Grupo Clarín y sus directivos, sino también las contradicciones de la AFIP en lo de Ciccone. A Echegaray le molesta que le recuerden que hubo 2 posiciones muy diferentes de su parte en la misma opereación, pero él no puede desmentir a la realidad. Urgente24 denunció desde el primer momento que Echegaray se había opuesto, en la interna del poder, a que Boudou accediera al taller calcográfico, y luego cambió de discurso, probablemente a pedido de Néstor Kirchner.
Lucio Fernández Moores escribió en Clarín:
«En su edición de ayer (domingo 11/03), Clarín informó que el juez en lo Comercial Javier Cosentino había calificado de “llamativa” la “postura” de la AFIP en el expediente a su cargo, donde primero había pedido la quiebra -como decenas de otros acreedores de Ciccone- y poco tiempo después -en un “breve plazo”, había dicho el juez en su resolución-, con la aparición de los misteriosos fondos aportados para el levantamiento de la misma, aceptó retirar el pedido y cobrar sus acreencias a través de un generoso plan de pagos.
“Sería llamativo si la AFIP no quisiera cobrar y el juez le levantara la quiebra. Pero siendo normal que el Fisco quiera cobrar sus impuestos, llamativo es que se considere una situación regular como ‘llamativa’”, sostuvo Echegaray en un comunicado de prensa. Allí también cuestionó a los diarios Clarín y La Nación, que habían informado sobre lo que había dicho el juez sobre la AFIP en la propia quiebra.
“Lo llamativo es que el juez levante la quiebra como lo solicita el quebrado y sea el mismo juez el que considere ‘llamativo’ que la postura de la AFIP -de querer cobrar otorgando un plan de pagos- se trate para él de algo ‘llamativo’”, insistió el funcionario.
En setiembre de 2009, al disponer el levantamiento de la quiebra, el juez había dicho lo siguiente: “Resulta cuanto menos llamativa la postura de la AFIP en la causa, modificando su criterio en breve lapso en lo atinente al otorgamiento de facilidades para el pago , lo que debió haberse hecho en su momento a fin de evitar las consecuencias que finalmente desembocaron en este resolutorio”.
Además, Echegaray salió a negar haberse reunido con el magistrado luego de que éste decretara la quiebra de Ciccone, en julio de 2010, según informó La Nación ayer. Sin embargo, dio a entender tácitamente que sí lo hizo antes . “Una vez que el 15 de julio de 2010 el juez dictó la quiebra de Ciccone no mantuve ninguna reunión personal con el magistrado”, expresó el titular de la AFIP.
Aún así, Echegaray dio a entender que sí se reunió con el magistrado al destacar que “no debe ser llamativo que las máximas autoridades del organismo, el administrador federal y los directores de la Dirección General Impositiva, Aduanas y de la Dirección General de Recursos de la Seguridad Social mantengan reuniones con jueces y funcionarios judiciales”.
“Esta interacción constituye una tarea normal y habitual que forma parte del rol de la función pública y que constituye un elemento más que permite a los funcionarios cumplir acabadamente con sus deberes”, añadió el jefe de la AFIP.
Tal como hizo el propio Boudou, ayer Echegaray apuntó a la empresa Boldt, a la que la Justicia le había entregado cautelarmente el manejo de la planta de Don Torcuato a través de un contrato de alquiler . “Resulta que pedimos la quiebra para cumplir con nuestra función primordial de recaudar, buscando un mecanismo de pago ajustado a derecho, y aparece Boldt, que no cumple con la AFIP sino que además usufructúa de los bienes de Ciccone con una situación fiscal irregular”, se quejó. (…)».
Fuente: U24