El dictamen responde a una presentación de un empleado de la administración publica al que le faltaban 3 años para jubilarse, pero lo que en realidad esconde es una jubilación anticipada de varios jueces que casualmente con esos 10 años de aportes y a eso sumados algunos otros, se jubilarán próximamente.
En síntesis seguimos pagando jubilaciones de privilegio, privilegios de unos pocos, pasando a la inactividad a personas en plena edad de productividad pero además dándole una jubilación de varios miles de pesos que como si fuera poco en la mayoría de los casos se va de la provincia y además cobrando zona como si siguieran acá pero en distintos puntos del país donde cobran tres o cuatro veces mas que el sueldo de cualquier empleado en actividad.
El IPAUSS ha pasado por las jubilaciones anticipadas, los 25 inviernos, ahora los 10 y el próximo paso es el anuncio de la quiebra y el traspaso a la nación. Aun me pregunto quien dijo que Vicente Sinchicay y el actual directorio podían manejar eso, quienes autorizaron la desaparición del ex Instituto de Previsión Social y la caja, donde están los que se llevaron los 208 millones de dólares que lo hacia el mas importante del país, en fin nada de eso se resolvió nunca y lo peor es que miles de fueguinos, si siguen a este paso, no se van a poder jubilar nunca, porque la caja solvento jubilaciones como la de Hutchinson de mas de 43 mil pesos, de ex empleados públicos de todas las áreas que no son de menos de 11.000 pesos, etc, etc.
Nadie dice nada, ni siquiera los que hacían paros por la situación del IPAUSS, es evidente que eso era para la tribuna y que jamás les importó, como no les importa ahora que se funda la caja y ni lo que les pasará a los que vienen detrás. Recuerdo un marcha de reclamo por los sueldos de los jubilados que encabezaban entre otros Mónica Mendoza, Lito Castro y otros ex funcionarios, mientras el inexorable camino a la quiebra seguía sin solución de continuidad. Siempre importo el ahora, el día, la quintita propia, jamás lo que le ocurriría al conjunto y hoy ya no hay marcha atrás.
Hoy la realidad es que hay tres opciones, una diluir el IPAUSS y volver a empezar de cero contando con tres o cuatro empleados y no los 300 que insumen unos 38 millones de pesos mensuales, deuda cero y todos contentos.
La segunda opción es terminar con las jubilaciones que se pagan a quienes están fuera de la provincia con zona, sacársela y que perciban lo que les corresponde según el lugar donde se encuentren y de esta manera ahorrar varios millones de pesos y generar fondos para quienes se están por jubilar después de muchos años de trabajo.
Y por ultimo pagar la deuda en un plazo medianamente corto para evitar el quiebre, o transferirla a nación y se acabo el problema.
Esto no lo va a decir nadie, ni los gremios, ni los directivos del IPAUSS, ni el gobierno, pero todos lo piensan porque saben que no hay salida, no tienen una sola idea que permita una solución para el conjunto y además como sufren de síndrome de corbata no son capaces de presentar una apelación o un recurso de amparo contra el dictamen de Fapiano aun a sabiendas de que es el tiro de gracia para el IPAUSS.
En síntesis, el IPAUSS esta quebrado, todos lo saben y nadie lo dice y lo que acaba de dictaminar Fabiano hace que varios jueces se puedan jubilar prácticamente sin haber aportado a la caja, es decir autoriza un saqueo sistemático que terminará por borrarla del mapa. Pero claro a los que ya se jubilaron esto no les importa, están salvados, salvo que les quiten la zona, los que vienen que se jodan.
Así están las cosas, por lo demás silencio de radio, que no se sepa, así la sorpresa es mayor cuando les avisen que se van a jubilar con los montos que paga ANSES.
Armando Cabral
