Las esposas de los policías retirados y pensionados de la Provincia de Tierra del Fuego queremos expresar nuestra posición frente a los recientes acontecimientos vinculados a la Caja de Previsión de la Policía Provincial.
Así como en su momento solicitamos a la Justicia que se expidiera sobre la deuda que la Caja mantiene con los policías retirados de la provincia, hoy agradecemos el accionar del Poder Judicial, que ya ha dictado sentencia y ha dejado en claro que fue la propia Caja quien incumplió con sus obligaciones, al no abonar lo que correspondía y al extralimitarse en sus atribuciones mediante la Resolución 148/25, discriminando abiertamente a los policías de mayor antigüedad.
Ahora, con un fallo firme que reconoce lo evidente, esperamos que el Directorio de la Caja actúe con la madurez institucional que la situación exige y proceda a pagar lo adeudado a los más de 500 efectivos afectados, hayan presentado o no un recurso de amparo.
El derecho a percibir nuestros haberes no depende de una sentencia judicial: es una obligación legal y ética que la Caja debió cumplir desde el primer día.
Recordamos al Directorio que han incurrido en varios incumplimientos graves en sus funciones, no solo por decidir arbitrariamente quién cobra y quién no, sino también por liquidar en forma permanente y de manera irregular los haberes, sin haber dado jamás una explicación sobre por qué, habiendo aplicado los mismos descuentos a todos los policías de la provincia, los sueldos resultantes son tan diferentes entre sí.
Confiamos en que esta situación se revierta de inmediato.
Un nuevo conflicto judicial no solo sería injusto, sino también contribuirá a seguir desacreditando la credibilidad de la Institución , y la responsabilidad de evitarlo recae exclusivamente en quienes hoy administran la Caja.
Muchas gracias.
