– Tomar distancia de estos animales, ya que no son animales domésticos asociados al contacto humano.
– En ningún caso intentar acicalarlos o acariciarlos, a fin de evitar accidentes o ataques.
– No alimentarlos, a fin de evitar que el animal permanezca en ese sector y se retire.
– No obstaculizar su salida al mar.
– Evitar ruidos fuertes y movimientos bruscos que pudieran alterarlos.
Asimismo, se recuerda la vigencia de la ordenanza N° 1896/2004 que prohíbe la circulación de vehículos todo terreno, motocicletas y cuatriciclos sobre la zona costera.
Como ciudadanos responsables, debemos aprender a convivir con estos animales sin molestarlos. Respetemos y protejamos la vida silvestre.