Durante el período legislativo 2024–2025, Guadalupe Zamora se afianzó como una de las figuras centrales de la política riograndense. Al frente del Concejo Deliberante, su gestión se caracterizó por un liderazgo equilibrado, orientado a garantizar el funcionamiento institucional y a promover acuerdos entre oficialismo y oposición.
Uno de los hitos más relevantes fue la conducción del debate sobre el Presupuesto Municipal 2025. Zamora logró encauzar las discusiones hacia un consenso amplio, destacando la importancia de contar con una herramienta de previsibilidad en un contexto nacional complejo. “El presupuesto es la base para ordenar prioridades y dar respuestas claras a los vecinos”, señaló en el recinto, subrayando la necesidad de transparencia en la administración de los recursos públicos.
Más allá de los números, la presidenta del Concejo acompañó iniciativas vinculadas a la cultura, la juventud y la prevención de adicciones, reforzando el vínculo entre la labor legislativa y las preocupaciones cotidianas de la comunidad. Su estilo dialoguista permitió que el cuerpo deliberativo funcionara como un espacio de construcción colectiva, evitando fracturas internas y proyectando una imagen de institucionalidad sólida.
En síntesis, Guadalupe Zamora consolidó su perfil como gestora institucional y presidenta dialoguista, capaz de articular intereses diversos y de proyectar al Concejo Deliberante como un actor central en la vida política de Río Grande. Su gestión deja como saldo un período de estabilidad legislativa y de fortalecimiento del rol deliberativo en la ciudad.
