«Para el Gobierno, esta sesión no es válida», dijo el oficialista Ezequiel Atauche, una vez puesta en marcha la sesión. El debate comenzó con una discusión sobre el orden de los temas a tratar. Es que los senadores que responden a los gobernadores bregaron porque la sesión arranque con los temas que más les importan a los mandatarios provinciales.
Es decir, aquellos que buscan un mayor reparto de fondos a sus distritos por dos vías. Por un lado, que se coparticipen los ATN y, por otro, la eliminación de dos fideicomisos que se financian con el Impuesto a los Combustibles Líquidos y que esos fondos se repartan entre Nación y las 24 provincias, para que cada mandatario defina qué obras financiar.
En tanto, otros senadores, en especial los «Juan sin Tierra», es decir, aquellos que no responden a ningún gobernador, exigieron que se avanzara con los proyectos venidos en revisión de Diputados. Estos son: la Emergencia en Discapacidad; la prórroga de la moratoria previsional que venció en marzo; y la actualización del 7,2% de los haberes, junto con la actualización del bono mínimo (llevarlo de $ 70.000 a $ 110.000).
«Estos proyectos tienen que ir a comisión», afirmó la cornejista Mariana Juri. La radical fue la voz cantante de los gobernadores de Juntos por el Cambio que el miércoles por la tarde, zoom mediante, acordaron no tratar los dos textos impulsados por los 24 gobernadores hasta tanto no tengan dictamen de comisión.
Esta postura no fue compartida por los 10 mandatarios de ese sector (algunos insistieron con que se trate «sobre tablas»), así como tampoco por otros gobernadores, que aspiraban a que ambas iniciativas reciban media sanción y sean girados a Diputados. De esta manera, contarían con un as bajo la manga para presionar a Milei con el reparto de los fondos.
Finalmente, se acordó que la sesión comenzara con los tres proyectos que tenían la media sanción de Diputados, y luego los dos impulsados por los 24 gobernadores.
Saldada esa instancia, comenzó el debate por la validez de los tres dictámenes. Es que estos fueron cuestionados por las autoridades del Senado, porque se firmaron en el marco de una reunión «autoconvocada» por Unión por la Patria, un sector de la UCR y la larretista Guadalupe Tagliaferri.
Mientras que el grueso de los senadores del Frente PRO y la UCR que responden a los gobernadores, además de la neuquina Lucila Crexell, consideraban que los proyectos no contaban con dictamen, el grueso de la oposición optó por validarlos. Con 42 votos a favor, 17 en contra y tres abstenciones, los dictámenes fueron considerados como válidos y se puso en marcha la sesión. Esto fue luego de casi dos horas después de la puesta en marcha de la sesión.
Senado: Los gobernadores dialoguistas no votarán por jubilaciones y Discapacidad
La atención del Poder Ejecutivo en la sesión es total, con la mira puesta en la sesión de este jueves en la Cámara Alta. Es que desde el entorno del líder libertario seguirán atentos lo que pase en el Senado, donde votarán proyectos que tildaron de «aberraciones» que afectarán el equilibrio fiscal del que se jactan en Casa Rosada.
Sin embargo, en las últimas horas la tensión bajó de nivel. Es que, a pesar de que Milei cruzó a los gobernadores y aseguró que tienen la intención de «destruir al Gobierno nacional», un número de líderes provinciales dialoguistas intentarán tender puentes con el Presidente, presionando para que sus legisladores no voten a favor de los proyectos que ya obtuvieron media sanción en Diputados.
En detalle, la liga de mandatarios de Juntos por el Cambio decidió avanzar con los proyectos que repercuten en sus arcas -reparto de ATN y el impuesto a los combustibles – a la par que bloquearán las iniciativas del aumento de haberes jubilatorios, prórroga de la moratoria y Emergencia en Discapacidad.
Se trata, además de un guiño a Milei, una ventana abierta para seguir negociando y no terminar de romper puentes con la Casa Rosada. Esta definición se tomó el domingo por la noche en un zoom y pesaron también cuestiones de reglamento.
El apoyo de los gobernadores será temporal y dependerá de cómo se mueva Casa Rosada con respecto a ATN y los combustibles. Fuentes cercanas a los jefes provinciales aseguran que salvada la cuestión reglamentaria – donde exigen que los proyectos no sean discutidos «sobre tablas«, sino con sus respectivos dictámenes-, podrían rever a posición y aportar sus voluntades.
«Es muy fuerte ir con todo junto. Y no hay dictamen. Si eso se ordena no veo inconveniente que apoyen todos», expresó otro operador del espacio de los gobernadores.