El trabajo remarcó que «los incrementos porcentuales en servicios esenciales fueron alarmantes». «En la Ciudad de Buenos Aires, el gas aumentó aproximadamente un 631%, el transporte un 707%, la electricidad un 390% y el agua cerca de un 350%, aumentos muy superiores al 129% que se vio en el gasto en alimentos».
«Los salarios resultaron insuficientes para mantener la posición social. Para que una persona sea considerada de clase media en el tercer trimestre de 2024, sus ingresos mensuales debían oscilar entre aproximadamente $372.000 y casi $1.192.000. Esto implicaba un aumento de alrededor del 125% en los ingresos desde el inicio del Gobierno para mantener esa posición social. Sin embargo, el incremento promedio de los salarios a nivel nacional fue de aproximadamente 119% en el mismo período», detalló el Centro RA.
«La aparente recuperación salarial en el último trimestre de 2024 no logra ocultar la realidad de una clase media obligada a redefinir su estilo de vida, sacrificando calidad y limitando su acceso a bienes y actividades que históricamente la identificaron. Este escenario plantea serias interrogantes sobre la sostenibilidad del poder adquisitivo y el futuro del bienestar de este sector fundamental de la sociedad argentina», alertó el informe.
Fuente:Ámbito