Gente que comienza a buscar distintas formas de supervivencia, en ferias, venta en redes, y hasta pedidos desesperados de alimentos, como el que vemos aquí abajo, donde una mujer suplica azúcar y pan duro porque están con hambre con su hijo. A pesar de que muchos hablan de la pobreza y de la supuesta preocupación, la situación es cada vez mas complicada y ya se han perdido miles de puestos de trabajo, los alquileres son impagables y además habrá nuevos aumentos este mes de septiembre.
Esta es una realidad muy compleja que requiere soluciones de fondo, de manera inmediata.
Esta misma situación a llevado es una decisión un tanto exagerada al poner alarma en los panes de manteca que pasaron de 1360 pesos a 3000, aun cuando el gobierno nacional dice que no hay inflación.
Mientras tanto el Superior Tribunal de Justicia y el Tribunal de Cuentas, se han otorgado salarios que superan los 10 y 9 millones respectivamente, demostrando una inequidad, que no se había visto hasta ahora