Ahora bien, ante este panorama y teniendo en cuenta la gravedad de la situación, viendo el escenario completo, analizando posibilidades, haciendo proyecciones, analizando estadísticas, como es que aun a los más brillantes economistas del pais no se les ha dado por preguntarse ¿Dónde esta el plan?, ¿Cuál es el plan?, no, nadie, lo conoce, y los fanáticos de uno y otro lado discuten banalidades, cuando medio pais está bajo la línea de pobreza, pero ninguno de los dos candidatos dice como van a salir de eso, o van a sacar al pais del 140 % de inflación, por ejemplo, pareciera que el tema no esta en la agenda de ninguno de los dos y no es un dato menor.
Tampoco encontramos en los discursos, alegatos, relatos o como se lo quiera llamar, nada sobre reducción del gasto político, Massa intentó sugerir algo, pero parece que no cayó bien porque no volvió a hablar del tema y Milei lo usa como caballito de batalla, pero no dice como lo va a hacer.
Tampoco se sabe que van a hacer con el campo, y siempre nos referimos a la planificación, análisis y estudios de las economías regionales, producción por sectores, ganadería, agricultura, pesca. Por un lado, se plantea un impuestazo, que ya se está discutiendo en diputados, propuesto por Sergio Massa y La Libertad avanza, propone dejar dos años todo como está y luego abrir el mercado, esto, es un sálvese quien pueda.
El pago de ganancias a los jueces, parece un tema imposible de tratar, lo mismo para senadores, diputados o funcionarios de alto rango, embajadores o cónsules en el exterior. Tampoco sobre reducir la enorme carga fiscal, la más alta de Latinoamérica y la tercera a nivel mundial, 815 % en los últimos 4 años.
Las metas de inflación, según las calificadoras de riesgo internacional, como Bloomberg, aseguran que, a fin de años, será de 160% al ritmo que viene subiendo mes a mes, por los que los salarios vienen perdiendo por goleada y cada vez es más difícil llegar a fin de mes y, un dato no menor es, que se está extinguiendo la clase media en Argentina.
Así las cosas, y con un dólar a 900 pesos, los precios completamente descontrolados, salarios en su mínimo histórico, gremios que no abren la boca y empresas que ya no pueden producir por falta de acceso a la moneda norteamericana para comprar insumos, nada hace suponer que, en ninguno de los dos casos, se este pensando en el futuro de un 45% de ciudadanos argentinos que están por debajo de la línea de pobreza, aun, trabajando.
Por eso quienes debemos informar, debemos tener acceso al famoso plan económico, a los proyectos para reactivar la industria, a saber, cuáles son las políticas para el ingreso del pais a la económica del conocimiento que ya esta perdiendo inversiones, a la aplicación de energías renovables, a las políticas en educación y salud, ambas con niveles que en general preocupan y mucho, ya que una propuesta es seguir como estamos, y la otra es arancelarla, como a las universidades.
En fin, dos propuestas antagónicas, pero ninguna de las dos, clara, concisa, aplicable, transparente y, sobre todo que contenga a gran parte de los argentinos que la estamos pasando muy mal. Hasta aquí hemos escuchado chicanas, incumplimientos, promesas inaplicables, como la dolarización o el cierre del CONICET, el Banco Central De la Republica Argentina (BCRA), varios ministerios y aún falta, el caso de Tierra del Fuego, concretar tres cuestiones de vital importancia, primero que harán con el Regimen de Promoción Industrial y como será su continuidad, luego la inclusión de los textiles en ese regimen y por ultimo como se equiparará la quita de las coparticipación por la reducción del impuesto a las ganancias que saca 27 mil millones de ingresos a la provincia, desde octubre de este año a diciembre de 2024.
El que diga que sabe esto, miente, porque no hay una sola letra escrita al respecto, porque el decreto para los textiles no se firmó, porque los fondos no aparecen y porque a 13 días de las elecciones, no hay ninguna señal que adelante que después de diciembre vayamos a estar mejor, al menos los ciudadanos comunes, trabajadores, emprendedores, productores, pymes, empresas, industrias o comercios.
El próximo 19 de noviembre se definen dos tipos de pais, cada uno sabe que debe votar una de esas opciones, lo que no debe olvidar es que su decisión debe incluir al conjunto de los argentinos, porque nadie se salva solo nadie sobrevive sin ayuda, esta todo permitido, menos el voto en blanco, la neutralidad o la tibieza, la mezquindad y el individualismo, si pensamos como equipo, puede haber una salida, pero individualmente, ya vimos que no se puede.
Lo que si está claro es que no hay un futuro prometedor, en tanto y en cuanto, la única política sea la recaudatoria, el impuestazo mensual, la carga fiscal, las trabas al crecimiento, el desarrollo, y la producción Argentina. Por ahí, no es.
Armando Cabral