En estos momentos, el Gobierno analiza cómo será la tercera fase del pago del Ingreso Familiar de Emergencia (IFE) otorgado por la Administración Nacional de la Seguridad Social (Anses). Se sabe que la nueva tanda será más acotada. Si se mantiene tal como se informó hasta ahora, la mitad de los 9 millones que hoy están cobrando el segundo bono, dejarán de cobrarlo.
La otra cuestión que se debate el ejecutivo es el monto de la ayuda. En las dos primeras tandas fue de $ 10.000. A futuro, analizan aprovechar el «ahorro fiscal» del achique a la mitad de beneficiarios para estirarlo a $12.000. Sería un salto del 20% en un período en el que la inflación fue cercana al 5%.
De esta forma, el ahorro fiscal resultante pasaría de $ 90.000 millones por tanda a $ 45.000 millones si se limita a la mitad de las personas y se mantiene el monto en $ 10.000, o de $ 54.000 millones si se lo lleva a $ 12.000.
El pasado viernes, al anunciar la extensión de la cuarentena hasta el 17 de julio, el presidente Alberto Fernández confirmó que el IFE tendrá una tercera tanda, aunque acotada a AMBA y Chaco. Esto puso en alerta a varias provincias que empezaron a moverse para no perder el beneficio. Entre ellas, Jujuy, donde del diputado José Luis Martiarena, del Frente de Todos, anticipó que inició gestiones ante el Jefe de Gabinete, Santiago Cafiero, para que no se excluya a la provincia norteña.
Fuente:filonews.com