Sostuvo que “los estándares que provee el convenio refuerzan el marco jurídico vigente y resultan fundamentales para la labor del ministerio recientemente creado”. “Son aporte insoslayable para el desarrollo de políticas públicas en materia de prevención en violencia laboral”, añadió la funcionaria nacional.
Consideró además que “el convenio 190 es el primer tratado internacional que aborda de una manera específica y exhaustiva la violencia y el acoso en materia laboral y que a la vez desarrolla el alcance de las obligaciones que tiene tanto el Estado como los particulares”.
No obstante, Gómez Alcorta sostuvo que “el enfoque de este convenio se distancia de los enfoques tradicionales que requerían, por ejemplo, la repetición en el tiempo de conductas lesivas para que se conviertan en delito”.
El senador Lovera sostuvo que “al mundo del trabajo le falta empatía, y la violencia y el acoso afectan la salud psicológica, física y sexual de las persona, afectan su dignidad y a su entorno” y consideró que “es necesaria su urgente adhesión a este Convenio”.
Afirmó que “tanto los legisladores como el resto de los poderes del Estado tenemos la obligación y la necesidad de incorporar perspectiva de género, especialmente en el mundo del trabajo, para que nadie quede afuera”.
En concordancia, la senadora por la provincia de La Pampa, Norma Durango (Frente de Todos) celebró que “estemos acá tratando esta iniciativa” y ponderó “la mirada de género que tiene este convenio”.
Por su parte, la senadora por la Ciudad de Buenos Aires, Guadalupe Tagliaferri (Juntos por el Cambio) manifestó “la importancia de este convenio” y que “el proceso que tuvo, que no fue por arte de magia”. “Tenemos que lograr un proceso de trabajo conjunto, de diálogo, de consenso””, sumó.