Uno medio instruido el otro profesional de la abogacía, una juez de La Pampa fue mucho mas allá al señalar sin tapujo alguno, “yo no caso gays porque primero esta la ley de Dios y después la de los hombres”, dije una Juez, no un medico o un ingeniero, y esto pasa en Argentina siglo XXI, no es raro, es un país lleno de contradicciones, es un país, donde a los chilenos los calificamos desvergonzadamente de chilotes, a los Bolivianos como “bolitas”, a los Paraguayos, como “Paraguas” y también hace poco aquí en Rio Grande un matrimonio de médicos se llevó una denuncia por discriminación por acusar de “paraguayo de mierda a un comerciante”, no resiste el mayor análisis
Los argentinos somos prejuiciosos, homofóbicos, la cultura machista es tan actual como las acciones católicas de Torquemada y muchos seguramente estarían felices de poder quemar a alguno u otro que no piense como ellos, la iglesia lava pecados de entre semana los domingos por la mañana. Pero esos mismos que califican a un homosexual como anormal, ni se preocupan por analizar la historia de la iglesia, no les interesan las denuncias por pedofilia, ni su negativa a sacar los tesoros del Vaticano para ayudar a los miles de millones de pobres de todo el planeta que viven en condiciones infrahumanas. Ni tampoco se los vio entre los miles de integrantes de los pueblos originarios que mueren en El Chaco, Formosa o Santiago del Estero. En Rio Grande hubo un cura que se hizo designar con categoría 24 para poder cobrar salario y dar la extremaunción, pero esta bien, de eso no se habla, para ellos el uso del profiláctico también es antinatural, pero las mas de 400 muertes anuales por abortos ilegales no les mueve un pelo porque el derecho de la mujer a decidir sobre su cuerpo no existe, aun cuando el hijo sea producto de una violación o se sepa de antemano que nacerá con malformaciones que no le permitirán vivir, tampoco los conmueve la muerte de miles de jóvenes en los sumideros del conurbano bonaerense a causa del paco, enfermedades, o delincuencia, ellos no están para nimiedades, no a ellos les interesa sentarse en sus tronos de oro a ver como la sociedad se resquebraja mientras el nuevo testamento sigue oculto porque allí se niegan todos esos beneficios que la iglesia se auto otorgó, “levanta un piedra y allí estaré, toma una madera y me encontraras”. Ellos están siempre cerca del poder, nunca un pensamiento en contrario, le dieron la comunión a los jefes de la dictadura militar que implantó el peor terrorismo de estado en Argentina y no se les movió un pelo, se callaron la boca siempre y ocultaron todo, en definitiva su historia es mas que clara, y seguramente seguirá así, no me preocupa, no voy a la iglesia hace mucho pero el trabajo que algunos hacen con los jóvenes con el discurso de sacarlos de la calle debería preocuparnos a mas de uno, es otra discusión para mas adelante ahora ocupémonos de los intolerantes, del vecindario, los ciudadanos comunes que por alguna razón de que desconozco parecieran haberse subido al palco central del Coliseo Romano y desde allí con el dedito acusador, califican acusan diferencian, segregan y denigran a todo aquel que sea distinto, piense distinto o actué distinto. ¿Distinto a quienes?, a estos que ahora son todos los adalides del eterosexualismo?, a ¿los mismos que mueles a trompadas a sus mujeres todos los días?, ¿los que dejan bebes abandonados en la calle?, ¿distintos a quienes?, ¿a estos que para referirse al otro lo hacen con términos como putito, mariquita, traba y otras tantas dignas del mas puro pensamiento troglodita que se pueda encontrar?, yo no me les quiero parecer ni por asomo, eso esta claro, pero porque además de ser imposible compartir una idea, es retroceder en el tiempo a la edad media. Ejemplos, Gorge Bush II ocultó y desheredo a su hija por ser gay, Mirta Legran dijo que su hijo había muerto de cáncer cuando en realidad murió de SIDA y pidió disculpas por ocultarlo, lo que no la hace mejor obviamente, pero hay mas, vamos al embarazo adolescente, este es otro caso de clara hipocresía de esta sociedad, a los que van los domingos a la iglesia y creen que Dios les perdona sus deslices, no les preocupa que esto suceda con la problemática social que acarrea, no, no, les preocupa el que dirán los demás entonces envían a sus hijas unos meses a la casa de la tía para que desaparezca, cuando no proponen un aborto y salvar las apariencias, pero eso no es un pecado, el pecado siempre lo cometen los otros, siempre es el otro el anormal, siempre el otro es diferente a esta raza inclasificable de intolerantes, xenófobos, discrimatorios, ya sea por color, tamaño, raza, poder adquisitivo, religión, política o aquello que ellos creen que al otro lo pone un escalón mas abajo y si es posible dos o tres; no son ni mejores, ni peores son diferentes, solo que todavía no lo saben. “Perdónalos Señor no saben lo que hacen” y ya que tanto les preocupa la palabra “El que este libre de culpa y cargo que arroje la primera piedra”, obvio no son frases mías, y ustedes los que tanto se diferencia del resto por pertenecer, seguramente deben saber de donde provienen. Ahhh y en la segunda frase no se estaba defendiendo a una señora de anteojos negros de la alta sociedad Argentina, sino a Maria, que si no me equivoco era una prostituta.
Los gays, lesbianas, transexuales y toda esa gran parte de la sociedad, los que decidieron mostrarse tal cual son tienen una ley que los respalde y no responderán a los agravios de la sociedad medieval que les toca tener en la vereda de enfrente para la que la igualdad de derechos no existe en su diccionario. Solo eso derechos civiles, derechos, desde ese punto de vista tan parcial, homosexuales, gays, lesbianas o transexuales pueden mostrar su pecado, ¿los que tantos los critican pueden mostrar los suyos?
Defiendo la igualdad de derechos ¿y? es políticamente incorrecto, me parece genial no me importa quedar bien con nadie que se crea superior a nada. Los arios se terminaron con los nazis gracias a Dios.
Armando Cabral
