El gobernador Jorge Colazo había anunciado durante una caminata por los barrios de la ciudad de Río Grande el pasado martes, que el Gobierno Nacional otorgará un préstamo de 20.000.000 de dólares para financiar la obra y la adquisición de los buques tipo roll-on roll-off.
A continuación, el texto completo de la nota aparecida en la edición matutina y en el portal web del periódico capitalino:
LA INTEGRACION DE TIERRA DEL FUEGO
Arranca una obra pública clave para el sur
Es el cruce del estrecho de Magallanes por aguas argentinas. Hasta ahora, hay que ir forzosamente por Chile.
No fueron pocos los fueguinos que recibieron la noticia con alegría, cuando el gobernador Jorge Colazo confirmó ayer el inminente inicio de obras para el cruce del estrecho de Magallanes por aguas argentinas entre Santa Cruz y Tierra del Fuego.
Las obras, que superan los 20 millones de dólares, serán financiadas con fondos de la Nación y el acuerdo será firmado esta semana entre los gobernadores de Santa Cruz y Tierra del Fuego.
La confirmación del comienzo de las obras la hizo el gobernador fueguino luego de mantener conversaciones con su colega de Santa Cruz, Sergio Acevedo. Asimismo, Colazo confirmó a Clarín que, «en los próximos días, se iniciará el estudio de factibilidad e impacto ambiental en las posibles zonas donde se instalarían las rampas de llegada y zarpada de los buques que harían la travesía».
Por ahora se habla de buques tipo Roll-On Roll-Off, por su facilidad y capacidad de carga. Se trata de una de las pocas embarcaciones aptas para el cruce de la boca oriental del estrecho de Magallanes, una de las zonas de mayor variedad de vientos y mareas.
Los estudios de factibilidad determinarán la zona adecuada para construir las cabeceras.
Serán levantadas, posiblemente, entre el puerto de Río Grande, en Tierra del Fuego, y Puerto Loyola, en Santa Cruz, distante 27 kilómetros de la ciudad de Río Gallegos.
Otras de las posibilidades es hacer el cruce por aguas argentinas entre Espíritu Santo, en territorio fueguino, y Punta Dúngenes, en suelo santacruceño.
La distancia que media entre estos dos puntos es de 18 millas náuticas, unos 32 kilómetros de distancia. De acuerdo al tipo de embarcación y su carga, como así también las condiciones meteorológicas, será el tiempo que demande la travesía.
El sector que podría verse beneficiado por el cruce en barco por aguas argentinas es el transporte terrestre de carga, que ahorraría tiempo y dinero.
En la actualidad, para cruzar el estrecho de Magallanes la única posibilidad es ingresar a territorio chileno; recorrer 240 kilómetros (cien de ripio) hasta Bahía Azul, y allí abordar un transbordador que demandará 30 minutos de viaje hasta Punta Delgada. El costo es de 100 dólares por cruce. Para los automóviles, la tarifa para el cruce es en la actualidad de 80 pesos.
Luego, hay que recorrer por territorio chileno otros 60 kilómetros hasta reingresar a territorio continental argentino. Desde Tierra del Fuego, utilizan la embarcación chilena 35 mil camiones y 70 mil automóviles por año, duplicándose esa cifra en época de vacaciones.
Para miles de fueguinos que usan este sistema para visitar a sus familiares en sus vacaciones, «será una gran obra».
