El gasto público no alcanza la meta del presupuesto

La recaudación crecerá moderadamente este año (13% i.a. en 2009 vs 34,8% i.a. en 2008) condicionando el cumplimiento de la meta de gasto presupuestada. Las partidas del presupuesto se están subejecutando: al 24 de mayo el porcentaje de gasto devengado se ubica por debajo del nivel que debería registrar a fines de abril. Es poco probable que se complete el Plan de Obras anunciado en diciembre para paliar la crisis internacional. Incluso peligra el cumplimiento del presupuesto original (que no incluye al Megaplan). Los subsidios son los gastos que más se están subejecutando: 14%, frente al 27% de igual período de 2008 y al 28% de enero-marzo de 2007.

La jurisdicción Obligaciones a Cargo del Tesoro, que concentra más de $ 12.000 millones en subsidios, muestra el menor nivel de ejecución presupuestaria.
La ONCCA, de la cual dependen los subsidios agroalimentarios, también muestra un porcentaje de ejecución muy moderado.
El bajo ratio de ejecución presupuestaria no implica necesariamente que el gasto crezca a tasas moderadas: al primer cuatrimestre, las erogaciones de la Administración Pública Nacional crecieron 26% i.a. El gasto continúa aumentando a elevadas tasas debido a la cancelación de gastos de ejercicios anteriores no pagados en su momento.
Para el segundo semestre no esperamos que el ritmo de ejecución retorne a los niveles teóricos, dado que, con los ingresos condicionados, una aceleración de la ejecución deterioraría aún más el superávit primario. Si bien los vencimientos de 2009 pueden cubrirse con fuentes internas, el déficit provincial se agravará y la Nación deberá financiar buena parte del mismo.
Las provincias registrarían un déficit primario de 0,6% del PBI y un déficit fiscal de 0,8% del PBI. Si la Nación registra un superávit primario de 1,8% del PBI el resultado del sector público consolidado seguiría positivo a nivel primario pero volvería al terreno negativo una vez descontado el pago de intereses.
 Si no se reabre el financiamiento externo esta situación se mantendría en 2010, con el agravante de que buena parte de las fuentes internas ya habrán sido utilizadas este año.

La política fiscal condicionada por la falta de recursos
Pese a la incorporación del flujo de fondos de las ex – AFJP ($ 14.000 millones este año), por primera vez desde 2004 la recaudación será menor a la estimación del Presupuesto Nacional. Esta merma en los recursos compromete a los gastos primarios estipulados en dicha Ley ($ 209.329 millones).
Ahora bien, estos efectos ya se perciben al observar la ejecución de las partidas contenidas en el Presupuesto. Al 24 de mayo, la Administración Pública Nacional (APN) devengó gastos primarios por $ 62.341 millones, un 29,8% del total.
Esta relación muestra que las partidas se están subejecutando: el porcentaje de gastos devengados se ubica por debajo del devengamiento “teórico” para el mes de mayo (37,7%) e incluso por debajo del correspondiente al mes de abril (30,1%).
A modo de comparación con períodos similares, al 27 de mayo de 2007 se había devengado el 37,4% del presupuesto mientras que al 25 de mayo de 2008 esta relación ascendió al 34,2%.

Obviamente, esta subejecución responde a los menores ingresos. Al 24 de mayo, la APN obtuvo el 30,4% de los recursos estimados en el Presupuesto, porcentaje sustancialmente menor al de años anteriores en períodos similares.
La jurisdicción que presenta un mayor nivel de subejecución es Obligaciones a Cargo del Tesoro (14,2%), que concentra más de $ 12.000 millones correspondientes a subsidios. Este porcentaje de ejecución se ubica muy por debajo del nivel teórico de mayo para esta jurisdicción (37,6%), incluso por debajo del nivel teórico de marzo (22,1%).
A modo de ejemplo, los dos principales programas de subsidios de esta jurisdicción (apoyo a sectores económicos, empresas públicas y entes binacionales) presentan una ejecución conjunta de apenas 13,8%.
El Ministerio de Producción exhibe también un reducido porcentaje de ejecución (17,9%). Dentro de esta jurisdicción, la ONCCA devengó apenas el 16,8% de su crédito para subsidios ($ 700 millones de $ 4.162 millones presupuestados).
Para peor, los pagos efectivos ascienden solamente a 1,2% ($ 50 millones). Según datos de esta oficina, en 2009 se pagaron compensaciones por $ 537 millones, de lo que se desprende que la mayor parte corresponde a períodos anteriores.
De hecho el gasto en subsidios es uno de los principales rubros de subejecución presupuestaria. Al primer trimestre (último dato disponible) la ejecución de subsidios ascendió a 14%, frente al 27% de igual período de 2008 y al 28% de enero-marzo de 2007.
Cabe resaltar que los bajos niveles de ejecución presupuestaria hacen peligrar el cumplimiento del Mega Plan de Obras presentado en diciembre. Dicho Plan consistía en la ejecución de la totalidad del Presupuesto de MinPlan para obras ($ 32.770 millones) y $ 24.030 millones adicionales. La ejecución de este Ministerio en transferencias y bienes de uso se ubica, transcurridos 5 meses, en apenas 35,5%.

Sin embargo, pese a la subejecución observada, las erogaciones siguen mostrándose dinámicas: hasta abril el gasto primario de la APN muestra un alza de 26% i.a. Esto se debe a que se está considerando el gasto en base caja (efectivamente pagado) y no al devengado. Si el gasto efectivamente pagado supera al gasto devengado, quiere decir que se está cancelando deuda flotante.
De hecho al primer trimestre, se canceló deuda exigible por $ 3.523 millones, por encima de los $ 2.580 millones del primer trimestre de 2008. En definitiva, el presupuesto se está subejecutando pero el gasto continúa aumentando a elevadas tasas debido a la cancelación de gastos de ejercicios anteriores no pagados en su momento (deuda flotante).
De la subejecución que actualmente se observa no sólo se desprende que no habrá este año una ampliación de las partidas (como en años anteriores) sino también que de acentuarse la desaceleración de los ingresos será difícil esquivar una marcada corrección en el ritmo de suba del gasto.

Las provincias, una carga adicional para la Nación
Teniendo en cuenta que en la segunda mitad del año la recaudación continuaría creciendo a ritmo similar al del primer semestre (en torno al 13% – 15% i.a.), vemos poco probable que se revierta la subejecución del gasto presupuestado observada hasta el momento.
Si bien existirá un efecto positivo del deslizamiento del tipo de cambio sobre los ingresos por comercio exterior, éste se verá compensado por las menores cantidades exportadas y la persistencia de los problemas que hoy se ciernen sobre el consumo y el mercado laboral.
Aunque la evolución moderada de la recaudación -crecería 13% i.a. en 2009 frente al 34,8% de 2008- ya tendrá impactos sobre el superávit primario -caería del 3,2% a 1,8% del PBI- la existencia de fuentes de financiamiento interno permiten cubrir los vencimientos de deuda de este año.
Dentro de las fuentes de financiamiento interno encontramos no sólo las letras y adelantos transitorios con el BCRA sino también un préstamo del Banco Nación al Tesoro –permitido por el presupuesto- por cerca de $ 10.000 millones.
Además, cabe recordar que el canje de préstamos garantizados generó un “ahorro” de servicios de deuda para el año 2009 de casi $ 6.300 millones, al tiempo que es cada vez más probable que se realice alguna operación financiera que alivie el fuerte pago del cupón e intereses del BODEN 2012 (US$ 2.200 millones) que debe realizarse en agosto.
Sin embargo, una mayor erosión del superávit primario nacional profundizará el deterioro que ya se observa del resultado consolidado del sector público: las provincias exhibirán un muy fuerte déficit que en buena medida deberá financiar la Nación.
De hecho, según nuestras proyecciones las provincias registrarían un déficit primario de 0,6% del PBI y un déficit fiscal de 0,8% del PBI. Si la Nación registra un superávit primario de 1,8% del PBI –como esperamos- el resultado del sector público consolidado seguiría positivo a nivel primario pero volvería al terreno negativo una vez descontado el pago de intereses.
Además, puede verse que el financiamiento del mismo proviene básicamente de ahorros acumulados y el avance sobre stocks privados (estatización AFJPs).

Con las fuentes internas limitadas, el agravamiento del déficit provincial obliga entonces a la Nación a mantener cierto nivel de superávit primario (única fuente genuina) para evitar un colapso de las cuentas provinciales.
En definitiva, con los recursos condicionados, una aceleración de la ejecución presupuestaria que deteriore el resultado primario dificultaría mucho el financiamiento del déficit provincial. Por esta razón, creemos que la tasa de expansión del gasto se moderará en el segundo semestre.
Por otra parte, sin financiamiento externo esta situación se mantendría en 2010, con el agravante de que buena parte de las fuentes internas ya habrán sido utilizadas este año.

Fuente:Ecolatina.

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