El pasado 8 de mayo el Juzgado Federal de la ciudad de Río Grande, recibió vía correo electrónico, una denuncia realizada por el veterano de Malvinas, Jorge Taranto, quien además está imputado por las torturas cometidas a soldados durante la guerra.
En el escrito Taranto se presentó junto al Dr. Walter Weisswein y solicitaron ser querellantes.
En el documento, el supuesto agraviado, manifestó su voluntad de denunciar a dos soldados, y también a la exjueza, Dra. Lilian Herráez y al mismo fiscal de la investigación, Dr. Marcelo Rapoport.
“En ese orden, Taranto adujo haber sido damnificado directo de las presuntas falsedades sostenidas por las dos personas denunciadas y por la actuación de los funcionarios judiciales que habrían avalado u omitido esas situaciones, circunstancia que, según su criterio, le permitirían constituirse como querellante”.
Lo cierto es que, este lunes, “como primera medida, independientemente de lo que se resolverá en esta ocasión,
se rechazará el pedido de ser tenido como parte querellante, ello así en la medida que Taranto no resulta ser sujeto pasivo del delito denunciado y, por lo tanto, no puede ser considerado como particularmente ofendido
por un delito de acción pública en los términos del art. 82 del C.P.P.N”
En otro párrafo, la resolución judicial expresa que “la única manera en que esa presunta falsedad podría ser verificada sería a partir de una investigación de los hechos sobre los que versa la declaración para
evaluar si se corresponde con la realidad de los hechos. Ahora bien, no puede dejar de mencionarse que tal investigación ya se encuentra en curso en el marco del citado expediente FCR 63001777/2007 y, por lo tanto, es en ese contexto en el cual el aquí denunciante deberá ejercer su defensa para controvertir los
dichos a partir de los cuales fue imputado”.
“Cualquier otra solución implicaría la posibilidad de duplicar todas las causas penales en trámite, de manera tal de permitir a un imputado oficiar como querellante en una causa paralela con el consabido riesgo de que se arribe a conclusiones contradictorias entre ambos expedientes”.
“De esta manera, la solución para ambos supuestos es la misma: los hechos referidos en la denuncia deben ser investigados en la causa que tramitan para establecer qué fue lo que sucedió y poder extraer conclusiones sobre lo declarado por los testigos y lo actuado por los funcionarios judiciales y del Ministerio Público Fiscal”.
No es la primera vez que Jorge Taranto, intenta tergiversar hechos que son investigados en la Justicia Federal de Río Grande, en la causa por torturas cometidas a soldados en Malvinas.
Incluso, en otras ocasiones a utilizado sus redes sociales, para hostigar a los denunciantes, como así también para aducir que desde la justicia se lo “censura”, ya que no puede difundir un cúmulo de pruebas que, según Taranto, posee con él.
Fuente: Tarde pero Seguro