Los argentinos van cambiando sus consumos. Más allá de las categorías que restringen o moderan, también van buscando diferentes marcas y canales que sepan acompañarlos en el momento actual.
«El 96% de la población argentina redujo o abandonó la compra de algún bien, servicio o actividad respecto de 2018. Esto quiere decir que prácticamente todos están adoptando alguna estrategia para afrontar la crisis, sin importar el sexo, edad, nivel socioeconómico o región»,asegura Veitz.
¿Qué categorías no están dispuestas a resignar los argentinos? Veitz cuenta que «hay tres grupos por fuera de la canasta básica: Los servicios (seguros, obra social, telefonía celular, internet en el hogar, etc) que los argentinos intentan mantener; un conjunto de gastos más corrientes que se están moderando, es decir se hacen pero menos que antes, como son la compra de ropa, salidas a comer afuera o ir al cine; y los gastos más grandes o atados al dólar que se están restringiendo como viajes al exterior, compras a través de internet o tecnología».
Ámbito