Llama poderosamente la atención la aparición repentina de algunos dirigentes políticos, algunos electos, que desde hace tiempo no emitían sonido y de repente aparecen opinando del poder que algunas fuerzas están tomando, particularmente después de las elecciones del domingo.
Algunos inclusive no movieron un dedo, otros jugaron en contra, pero ahora son los primeros en opinar, calificar y evaluar ¿Cómo es?, alguien puede explicar estas actitudes?
No parece muy coherente que quien trabajo en contra de un candidato de su propio partido ahora salga muy orondo diciendo que el resultado se debe precisamente a la coherencia, es una incoherencia o me parece a mi?.
Otra declaración dice “dejamos de ser una sorpresa electoral” y hubiera sido menos sorpresa si todos hubieran trabajado para que ganara el candidato propuesto.
Estas actitudes hacen pensar que algunas cosas no son como parecen y aun cuando los dirigentes de todos los partidos se han preocupado por ocultar estos chisporroteos, siempre salen a la luz.
Algunos no pueden explicar porque perdieron, otros no pueden explicar porque no votan a sus candidatos, otros se alegran con los triunfos y algunos optan por las actitudes hipócritas como esta de aparecer después del triunfo.
Como dijo alguien, “las derrotas se socializan y los triunfos se privatizan”, que gran verdad no?
Ahora este tipo de mezquindades políticas no deberían ser propiedad de otros partidos y no de las fuerzas emergentes?, porque si es así que es lo que prometen?.
Como es que se olvidan porque llegaron ahí?
No hay referente que valga?
No hay discurso de coherencia hacia adentro?.
No solo hay que parecer, hay que ser coherente, hay que ubicarse en el lugar que a uno le corresponde, no se le puede faltar el respeto a los dirigentes nacionales, ni a los locales como de hecho se hizo al no aparecer por ninguna de las actividades que esos referentes realizaron en la provincia.
Entonces? En que quedamos?
Muchos de nosotros creímos en esa actitud de honestidad intelectual y se convirtieron en referencia para muchos jóvenes pero quienes los conocemos bien a todos y uno por uno sabemos que se dejan influenciar por aquellos que en su resentimiento histórico político no pueden cerrar heridas y creen sabérselas todas cuando en realidad de lo que se trata es de una gran herida abierta imposible de cerrar que quieren hacerle pagar a cuanto Cristo se les cruce, y en esa bolsa meten a todo el mundo.
No es así, no se construye espacio político desde la mezquindad, el resentimiento, la envidia o lo que es peor la soberbia, propiedad exclusiva de los inútiles.
A veces no basta con parecer hay que ser y aca esta faltando lo ultimo, ser por sobre todas las cosas solidario con aquellos que alguna vez te tendieron una mano para que crezcas, para que asomes la cabeza, para que de una vez por todas puedas vivir dignamente, y que eso no se te suba a la cabeza y cambies el discursito revolucionario por el del burgesito mediocre devenido funcionario con sueldo abultado que evidentemente no alcanza para cubrir los verdaderos objetivos que se persiguen.
La verdad da pena y es muy feo sentir pena por alguien, pero a veces es triste la verdad, lo que no tiene es remedio.
Como dijo el General Juan Domingo Perón “El que le da pan a perro ajeno se queda sin el pan y sin el perro”.
Nunca mas cierto no?
Los que ahora si hablan
Llama poderosamente la atención la aparición repentina de algunos dirigentes políticos, algunos electos, que desde hace tiempo no emitían sonido y de repente aparecen opinando del poder que algunas fuerzas están tomando, particularmente después de las elecciones del domingo. Algunos inclusive no movieron un dedo, otros jugaron en contra, pero ahora son los primeros en opinar, calificar y evaluar ¿Cómo es?, alguien puede explicar estas actitudes
