El intendente Gustavo Mella dejó inauguradas las sesiones ordinarias del Concejo Deliberante con un discurso al que ya nos tiene acostumbrados. El jefe comunal se remitió a repasar lo hecho y para eso se tomó mas de una hora, detallando cada obra concretada, cada convenio y acción llevada a cabo.
Reconoció la tarea del su gabinete, el trabajo en equipo agradeció al Concejo Deliberante el acompañamiento, destacó a cada área del municipio y a todos los trabajadores municipales por el acompañamiento como así también a las entidades sindicales, organizaciones sociales y todo aquel que colaboró con la gestión.
Fue un discurso conciliador, analizado al detalle donde nada quedo de lado, incuso aseguró que la fecha de elecciones será conjuntamente con la provincia, no las adelantara y predijo un año de mucho trabajo en la continuidad del trabajo que se viene realizando, la producción, el empleo, en este punto sostuvo que «Rio Grande debe ser la ciudad del autoempleo», y de hecho lo logrado con los productores locales, el desafió de producir y el centro de capacitación laboral así lo demuestran.
Esta fue la ultima aparición en un acto de este tipo del Intendente Gustavo Melella y seguramente será recordado por esta interminable lista de hechos y no palabra, y un dato no menor, todo sin endeudar al municipio y con fondos propios. No es un dato menor.
