El proyecto sustenta sus fundamentos en que, “el cuidado de los adultos mayores y las personas que por razones biológicas, psicológicas, físicas y/o sociales, no pueden realizar por si solas tareas cotidiana, requiere de la capacitación correspondiente a fin de lograr una adecuada contención y comprensión de la problemática de la persona asistida”.
“Resulta necesario reconocer la labor de los trabajadores, que se dedican al cuidado de personas, exigiendo su capacitación para jerarquizar su profesión, reforzando la identidad del cuidador y garantizando los derechos del que merece ser cuidado”, versa en los fundamentos el texto.
El FpV propone que se cree, bajo la órbita del Ministerio de Desarrollo Social, un registro provincial de asistentes en el cuidado de personas. Esta área, además de relevar y registrar, tendrá a su cargo generar las capacitaciones permanentes, celebración de convenios y la supervisión y control de la actividad.
El asunto fue girando a la Comisión de Salud, donde se dará debido debate al articulado que propone el FpV bajo la autoría de la legisladora Myriam Martínez. Se espera dar una regulación adecuada que garantice la idoneidad de quienes desempeñan esa función. De esta forma, el asistido obtendría una prestación adecuada.
