Asimismo, durante una exposición en el Movimiento Productivo Argentino (MPA) junto al rabino Sergio Bergman, Duhalde enfatizó que «debemos terminar para siempre con las peleas, con los agravios, porque ya terminaron las elecciones». Este encuentro representó la primera aparición pública del bonaerense tras su viaje por el exterior durante las legislativas.
En su discurso de presentación de Bergman, Duhalde se refirió a cuando asumió la Presidencia en 2002 y destacó el respaldo en aquel momento de las «cuatro entidades del campo, ONG’s, sindicatos y empresarios». «En abril de 2002 no había nada y hubo diálogo», puntualizó y por ello le aconsejó a la presidenta Fernández de Kirchner convocar al «consenso» entre los distintos sectores.
En ese marco, dijo que «estamos muy acostumbrados a hablar del pasado, las elecciones son el pasado» y actualmente, agregó, «tenemos la enorme posibilidad» de apuntar al «futuro» del país.
«Tenemos que actuar con patriotismo, tenemos que sentarnos, juntarnos y escucharnos», instó Duhalde sentado junto al titular del MPA, Carlos Brown y el rabino Bergman. Más temprano, Brown sostuvo que el ex presidente se ha propuesto «ayudar para normalizar» el partido justicialista, golpeado luego de la derrota sufrida por Néstor Kirchner en las elecciones legislativas, y para ello pretende «incluir a todos los sectores». En declaraciones a DyN, Brown ratificó que «va a trabajar para la reorganización partidaria».
Además, acusó al Gobierno de no haber interpretado el «voto bronca» de la ciudadanía contra su estilo y gestión, y calificó de «obsecuente» al ahora jefe de Gabinete Aníbal Fernández, por estimar que la presidenta Cristina Fernández o su antecesor, Néstor Kirchner, pueden tener chances de volver en el 2011.
«Pero, por favor, tanto ella como él han tenido el rechazo del 70 por ciento del electorado en los comicios pasados, cómo pensar hoy en las posibilidades electorales del kirchnerismo», disparó en declaraciones a DyN y denunció que el ministro Fernández es «un hombre obsecuente y, en esa obsecuencia, vive ‘errando el vizcachazo'».
En tal sentido, rechazó las voces kirchneristas que vienen criticando los pasos de Duhalde encaminados a rearmar el PJ y, entre otros, le apuntó al gobernador chaqueño, Jorge Capitanich, quien advirtió que el bonaerense «puede opinar» pero que no lo ve «liderando un proceso de cambio dentro del justicialismo, ni un proyecto político en el país». «Antes, cuando era jefe de Gabinete de Duhalde no decía lo mismo», disparó, ácido, el titular del MPA y sostuvo que el bonaerense «es un hombre claramente de consulta, por lo que significa y ha significado en la vida política del país y del justicialismo. Nadie le puede quitar esa importancia, aunque quiera».
Por su parte, el titular de las 62 Organizaciones, Gerónimo Venegas relató que ayer mantuvo una reunión con Duhalde y le dijo «que va a ayudar a normalizar el partido». En ese contexto, según supo DyN, Duhalde pretende que en la normalización del partido a nivel provincial y nacional también se involucre Francisco de Narváez, pese a que el empresario rechazó tener que ver con el armado del partido.
Desde París, el gobernador de San Luis, Alberto Rodríguez Saá, evaluó que el ex presidente «ha cometido muchos errores» y aseveró que el bonaerense «quiere seguir poniendo gente a dedo» para comandar el peronismo. No obstante, Rodríguez Saá aclaró que «es importante» que Duhalde «participe» en la reorganización del justicialismo pero aseguró que deben haber «elecciones internas».
Fuente: DYN
